Ante la sospecha de tener Covid-19, el procedimiento estándar es acudir a una unidad de urgencia o pedir hora médica-presencial o de telemedicina- donde un profesional de salud extienda la orden necesaria para tomar el examen PCR.

Pero ahora, y a través de un nuevo decreto de la Subsecretaría de Redes Asistenciales, ya no será requisito, pues se permitirá realizar el examen de detección del coronavirus “a requerimiento del propio interesado”.

Según consta en la modificación emitida el pasado jueves, “se instruye dar cumplimiento a la normativa dispuesta en la materia, y facilitar la realización del examen PCR, incluso en aquellos casos en que es requerido directamente por el interesado, contribuyendo así a la detección temprana de esta enfermedad”.

Notificación obligatoria

A renglón seguido, el decreto dice que si bien los pacientes podrán ir directamente a un centro médico a solicitar el testeo, los laboratorios deberán notificar obligatoriamente a la autoridad de Salud sus resultados, tal como lo hacen hoy los médicos en la plataforma Epivigila, que registra toda la información de personas sospechosas y contagiadas.

Desde el Consejo Asesor Covid-19, la epidemióloga María Teresa Valenzuela comenta que está de acuerdo con levantar esta barrera, especialmente ahora que comienzan a elevarse los casos. “En un momento como este, en que hemos visto incremento de casos, poner obstáculos para que un paciente se haga el examen, no me parece”, dice.

Valenzuela, sin embargo, advierte que esto plantea que los laboratorios notifiquen oportunamente el caso sospechoso. “Hay que asegurarse de que los 159 laboratorios de la red estén conectados con Epivigila, porque tiene que haber una ubicación del caso y sus contactos por si este resulta positivo. Debe existir una persona que haga estas notificaciones a la plataforma”, señala.

Esta preocupación también la comparte la infectóloga de la Universidad de Chile y vicepresidenta de la Sociedad Chilena de Infectología (Sochinf), Claudia Cortés. “Esta modificación facilita el acceso al diagnóstico, pero queda el conflicto de quién se va a hacer cargo de las notificaciones. Hoy es el médico quien completa el formulario de Epivigila. Con esto, cuando vaya la persona al laboratorio tiene que quedar superestablecido quién hace el seguimiento del caso”, asevera la infectóloga.

Luis Delpiano, presidente de la Sociedad de Infectología, planteó que esta medida “aporta más libertad y eventualmente mayor pesquisa. Sin embargo, es un examen de indicación médica en general, eso no se va a perder, así que toda persona que vaya con síntomas sugerentes va a tener igualmente su orden médica. Esto se abre para la población que se ahorra el médico o que no está en una situación de mayor complejidad” y advirtió que “lo importante es que se mantenga una alta notificación epidemiológica, un alto índice de trazabilidad y que el examen se siga tomando en los centros calificados para ello”.

Implementación

A propósito de la modificación, en los laboratorios ya se proyecta cómo se implementará para poder cumplir con la notificación a la plataforma Epivigila, labor que actualmente recae en el médico que había indicado el PCR.

Beatrice Herve, microbióloga del laboratorio de Clínica Las Condes, comenta que la medida “favorece el testeo, pero tenemos que ver qué dificultades tiene, porque una de ellas puede ser la notificación. Otra es la capacidad de laboratorio, porque no es infinita. Nosotros tenemos sistema de agenda y la demanda esta semana ha ido progresivamente aumentando”.

La doctora Erna Cona, médico jefe de control de infecciones de Clínica Indisa, plantea que “el médico da un número de folio de Epivigila y Salud queda notificado que el paciente se hará un test. Para agilizar la búsqueda esto me parece bueno, pero para la logística de la notificación se complejiza”.