En tres meses se amplió el plazo de la investigación penal en contra del exdirector general de la Policía de Investigaciones (PDI), Héctor Espinosa Valenzuela; su cónyuge, María Magdalena Neira Cabrera; y su exayudante personal y mano derecha durante sus seis años al mando de la institución, Eduardo Villablanca.

En octubre del año pasado, los tres fueron formalizados por los delitos reiterados de malversación de caudales públicos y falsificación de instrumento público y un delito de lavado de activos.

A tres meses de la formalización, el fiscal regional de Magallanes, Eugenio Campos, realizó la solicitud para ampliar el plazo de investigación -a partir del 14 de febrero- ante el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago.

Lo anterior, por “diversos requerimientos bancarios, de información, registros contables, diligencias solicitadas por el Consejo de Defensa del Estado y movimientos de cuentas”.

Sobre estos antecedentes -detallan en un comunicado- “se requiere profundizar para la identificación de cuentas corrientes, giradores, flujo de fondos, montos totales y la elaboración de informes periciales dispuestos para acreditar la existencia de los delitos”.

Otro de los argumentos que se precisan para aplazar el plazo del periodo de investigación es el levantamiento del secreto bancario, el cual “permite analizar la trazabilidad de dineros, como también la adquisición de bienes”.

Antecedentes

La investigación se inició en diciembre de 2020 tras un Reporte de Operación Sospechosa (ROS) realizado por parte del banco de María Magdalena Neira a la Unidad de Análisis Financiero (UAF). La mujer, quien en ese entonces se desempeñaba como funcionaria del Servicio de Impuestos Internos (SII), canceló cerca de $250 millones al contado en vales vistas en el marco de la adquisición de un departamento en Las Condes.

Tras la indagatoria, se detectó que entre junio de 2015 y mayo de 2017, tanto Espinosa como Neira recibieron alrededor de 146 millones de pesos a sus cuentas bancarias en depósitos provenientes de gastos reservados asignados a la PDI, los cuales, además, fueron realizados por Villablanca.