Cifras de Carabineros evidencian alza en casos de homicidios en 2014

En 2012 y 2013, los asesinatos registrados eran de 474 y 475. El año pasado llegaron a 528, lo que representa un aumento del 11%.




El 20 de octubre del año pasado, Luis Chunquecoy (47) fue asesinado mientras celebraba, junto a un grupo de amigos, el triunfo de Colo Colo sobre la Universidad de Chile, en Pudahuel. Por este hecho fue detenido un vecino.

Este fue uno de los 528 casos de homicidios que se registraron en 2014 en el país, según el reporte estadístico elaborado por Carabineros. Esta cifra marca el primer quiebre en la tasa (casos por cada 100 mil habitantes) de homicidios en los últimos tres años. Mientras que en 2012 la tasa era de 2,7 y en 2013 de 2,7, el año pasado esta cifra se incrementó a un 3,0.

Las estadísticas con que cuenta Carabineros también reflejaron que en más de la mitad de las denuncias no se registraron detenidos. De hecho, del total de 528 casos, en 291 no hubo personas aprehendidas.

Según el Departamento de Análisis Criminal de la policía uniformada, "la tendencia mundial indica que la policía reaccione con prontitud ante los casos de homicidio, al grado que en poco más de 60% de éstos, existen pruebas que permiten hallar y aprehender a uno o varios sospechosos en cada incidente, lo que permite que se lleve a cabo el proceso judicial. No obstante, en América la proporción es de 50%".

La unidad de la policía uniformada agregó que "es importante hacer presente además, que en los resultados de casos con homicidio, pueden existir variaciones importantes, teniendo presente que en un momento el fiscal puede disponer que la investigación de un homicidio prosiga con la Policía de Investigaciones (PDI), y por tanto, en días posteriores puedan existir resultados favorables, lo cual por razones obvias, no están en el registro de Carabineros".

No obstante, los policías sí se refirieron a un factor que puede incidir en bajo número de detenidos: "Se relaciona con las características de los homicidios, que en la última década eran frecuentes los asociados a riñas y personas conocidas, ahora se producen en la vía pública y domicilio particular, no aparecen testigos para declarar que puedan cooperar, ni dar claridad respecto al móvil".

Los casos de homicidio son monitoreados de cerca desde el gobierno, específicamente por la Subsecretaría de Prevención del Delito. Si bien en la repartición indicaron que las mayores tasas de homicidio de los últimos años se registraron en 2005 y 2006, con un 3,5 y 3,6, respectivamente, sí están trabajando con las policías para establecer si ha cambiado la composición de estos crímenes. Para ello, se están analizando todos los casos. Hasta el momento, se ha descartado que este incremento tenga relación con una eventual aparición de delitos ligados a sicarios.

El subsecretario de Prevención del Delito, Antonio Frey, indicó que "como autoridad estamos muy atentos a los cambios que pueda experimentar este delito y, junto con las policías, estamos permanentemente monitoreando cualquier cambio en las características que presenta el homicidio en nuestro país. En Chile, este delito se da mayoritariamente entre personas conocidas, que tienen algún vínculo, y el móvil está relacionado con discusiones, rencillas anteriores o riñas, entre otros. Se trata de un delito de carácter urbano y se producen mayormente los fines de semana en la noche, asociados a peleas". Agregó que "en términos generales, en Chile el homicidio no es un delito ligado al crimen organizado, como ocurre en otros países de la región en que los índices son muy superiores".

La autoridad de gobierno también entregó un análisis de los homicidios ocurridos en Chile: "El mecanismo más utilizado es el arma corto punzante (46,8%), seguido de las armas de fuego (36,6%). Esto último contrasta con la cifra promedio de homicidios con arma de fuego en las Américas, que llega al 66%". Asimismo, señaló que "las víctimas y victimarios son principalmente hombres (87% y 78% respectivamente). Los victimarios se concentran en el rango etario más joven, de 15 a 24 años (47%) y las víctimas en el de 20 a 29 años (31,3%)".

Respecto a las medidas para revertir esta alza en estos crímenes, Carabineros indicó que, según la Organización de Naciones Unidas para el Crimen y la Droga, se recomiendan medidas tales como "controlar los horarios de establecimientos para vender alcohol". Otros casos apuntan a "monitorear las víctimas de violencia ejercida por un compañero íntimo o un familiar".

Según la policía, "en el plano local, un énfasis de esta materia, lo aborda el cuarto pilar 'focalización territorial', señalado en el Plan Nacional de Seguridad Pública y Prevención de la Violencia del Delito, enfocando acciones en los barrios prioritarios (concentración de vulnerabilidades) y barrios de alta complejidad".

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