No sólo deberíamos recordar la importancia que tiene proteger nuestros oídos en medio de la conmemoración del Día Mundial del Ruido, considerando que son órganos altamente especializados, que además de permitirnos oír, mantienen nuestro equilibrio corporal.
Una de las consecuencias "silenciosas" de los ruidos molestos, por ejemplo, es la hipoacusia o pérdida parcial de la audición.
Según el responsable de Calidad, Formación y Audiología de Centros Auditivos Gaes en Chile, el fonoaudiólogo Luis Ortega, "muchas personas se van acostumbrando y no son conscientes de lo que les pasa hasta que comienzan a escuchar más bajo, entrecortado, o simplemente se acostumbran a que se les repita parte de una conversación", advierte.
"Es importante detectar a tiempo los síntomas de este tipo de enfermedades porque de acuerdo a lo que indica la Organización Mundial de la Salud (OMS), aproximadamente la mitad de los casos de discapacidades auditivas se pueden prevenir, sobre todo con la oportuna modificación de algunos hábitos", explicó el especialista.
Estos son 10 consejos básicos para proteger los oídos y evitar padecer este tipo de patología.
1. Baja el volumen de la televisión, la radio y de cualquier equipo de sonido.
2. No abuses del uso de reproductores de música durante más de una hora al día y con un volumen por debajo del 60% del máximo posible.
3. No te expongas a ruidos fuertes, ni utilices audífonos para oír música a todo volumen.
4. Abandona un lugar cuando el sonido sea muy alto.
5. Si trabajas con equipos ruidosos, usa protección auditiva.
6. Ten especial cuidado con los oídos cuando se presenten catarros, gripes o infecciones, que a la larga pueden causar pérdida auditiva. Debes recordar que las infecciones están consideradas como la segunda causa de pérdida de la audición.
7. Al ducharte o nadar, usa tapones a medida para proteger de la humedad el conducto auditivo externo. Trata de que sean de material hipoalergénico, flexible y ligero.
8. No introduzcas objetos en tu oído, ni siquiera los bastoncillos de algodón, ya que se puede dañar la membrana, el interior o provocar tapones con el cerumen acumulado.
9. Se recomienda realizar estudios a los niños, si se les detectan retrasos tanto en el aprendizaje como en el habla, ya que podría tratarse de problemas auditivos.
10. Visita al médico especialista cuando se presente alguna molestia en el oído y evita la automedicación.