EEUU libera y repatria a líder talibán

Estados Unidos entregó a Pakistán a Latifulá Mehsud, un alto mando del principal grupo talibán paquistaní, el Tehrik-e-Taliban Pakistan (TTP), capturado en Afganistán, informaron hoy la OTAN y fuentes oficiales paquistaníes.

La misión de la OTAN en Afganistán (ISAF) aseguró en un comunicado que tropas estadounidenses entregaron el sábado al Gobierno de Islamabad a "tres paquistaníes" que se hallaban en su custodia, aunque no reveló la identidad de los detenidos.

"La entrega se llevó a cabo después de conversaciones mantenidas entre Estados Unidos y Pakistán", según la nota, que matizó que los detenidos fueron transferidos a Islamabad tras recibir garantías de que serían tratados según las leyes humanitarias internacionales.

La OTAN añadió además que "el Gobierno afgano no estuvo implicado en la transferencia", como habían afirmado con anterioridad fuentes oficiales paquistaníes a los medios Dawn y Express Tribune, al relacionar la entrega con la visita el mes pasado a Islamabad del presidente afgano, Ashraf Gani.

Esos medios identificaron a uno de los detenidos entregados a Pakistán como Latifulá Mehsud, considerado el "número dos" del anterior jefe del TTP, Hakimulá Mehsud, muerto hace un año en un ataque de dron de EEUU en el noroeste paquistaní.

El que fue uno de los colaboradores más cercanos de Hakimulá Mehsud fue capturado en suelo afgano por el Ejército de ese país cuando se disponía a comprar armamento, aunque las fuentes no revelaron la fecha exacta de su detención.

La entrega de los tres miembros del TTP se produjo el mismo día en el que 12 miembros de ese grupo talibán murieron en el bombardeo de un dron estadounidense y otros 14 en una operación militar del Ejército afgano en el este de Afganistán, fronterizo con Pakistán.

Afganistán atraviesa una de sus etapas más violentas después de que el año pasado las fuerzas afganas se hicieran responsables de la seguridad tras la retirada paulatina de la misión de la OTAN, que culminará el próximo 31 de diciembre tras trece años activa.

No obstante, Estados Unidos prevé mantener a unos 10.800 soldados hasta 2024 y la OTAN a entre 3.000 y 4.000 militares con un nuevo rol a partir de 2015 de asesoramiento y equipamiento de tropas locales, frente a los alrededor de 130.000 que había en 2012.