El delantero brasileño Gabriel Jesús se despidió este miércoles del Palmeiras y dijo que el recuerdo que tendrá del club será "eterno" en su nueva etapa como futbolista del Manchester City inglés, por el que fichó a mediados de año.

"Llevo al Palmeiras entero en mi vida. Un club que me abrió las puertas y me dio la oportunidad de demostrar mi fútbol. Mi recuerdo del Palmeiras será eterno", dijo el atacante, de 19 años, en su última rueda de prensa como jugador del equipo paulista.

De esta forma, Gabriel Jesús no disputará este domingo la última jornada del Campeonato Brasileño ante el Vitória, en Salvador de Bahía, la cual fue aplazada para este fin de semana debido al accidente aéreo que acabó con la vida de gran parte de la plantilla del Chapecoense.

"Creo que es el momento de descansar y tener vacaciones. Vengo de un momento bueno y haciendo lo que yo amo. Después de hablar con todos quedó definido que era mejor quedarme fuera de este partido", agregó el delantero, titular en los últimos encuentros con la selección brasileña de fútbol.

Gabriel Jesús fue uno de los artífices en la consecución del noveno título de liga para el Palmeiras, conseguido de forma matemática en la anterior jornada y por el que se convirtió en el equipo más laureado de Brasil en esta categoría, con un trofeo más que el Santos.

Después de 85 partidos con la camiseta del Palmeiras, el ariete se despide con un balance de 28 goles marcados y dos títulos: la Copa de Brasil 2015 y el Campeonato Brasileño de este año.

Esta fue su segunda temporada como profesional en la que ha anotado doce goles en la liga situándose entre los máximos anotadores del campeonato, aunque por su ausencia en el último partido no conseguirá el título de "Pichichi".

"Dejo mis agradecimientos por todo lo que hicieron por mí, cada grito, incentivo, elogio y crítica también, que es importante. Pido disculpas si algún día hice algo que no dejó feliz a la afición. Les digo que no se olviden de mí, porque nunca me olvidaré de ellos", comentó Gabriel Jesús.

El ariete da un tempranero salto a Europa -como ya hicieron en el pasado sus compatriotas Robinho o Neymar, entre otros-, concretamente al Manchester City, entrenado por Pep Guardiola, que cerró su fichaje mientras el futbolista disputaba los Juegos Olímpicos de Río 2016.

El equipo inglés intentará integrarlo en la primera plantilla, pero no se descarta su cesión a otro club de menor entidad para iniciar su rodaje en el Viejo Continente.