Hace casi un mes, la Casa Rosada –palacio de la presidencia argentina- fue escenario de un pequeño incendio en el subsuelo. Según lo consigna el diario La Nación, este fue un hecho desconocido por la opinión pública hasta ahora.

En el episodio, se vio afectado el sistema que registra los ingresos y egresos a la Casa de Gobierno, y se habrían perdido datos de quiénes entraron antes del 21 de febrero por Balcarce 24, donde se ubica la Casa Rosada.

El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández , confirmó el hecho al diario Clarín,  explicando que el incendio se produjo por una "sobrecarga de cables viejos" y además descartó la posibilidad de que se hubieran perdido datos de registros. Ya que según el Jefe de Gabinete argentino, existe una copia de seguridad de todos los ingresos de los funcionarios.

Este hecho levantó sospechas en la prensa local, debido a que la fecha del incidente  se produjo tras la muerte del fiscal Alberto Nisman el 18 de enero y su denuncia por presunto encubrimiento contra la Presidenta Cristina Fernández. Denuncia que se apoya en grabaciones de conversaciones telefónicas que involucran, entre otros, al dirigente argentino Luis D'Elía manteniendo un diálogo con Alejandro Khalil, un supuesto agente iraní que dice estar en la casa de gobierno y tener un mensaje "urgente" para pasar al gobierno de Teherán.