Aprendizajes de una caravana

SEÑOR DIRECTOR

La caravana de hondureños que se dirige a EE.UU. ha develado la grave crisis humanitaria que atraviesa la región. Hombres, mujeres y niños huyendo es la representación más elocuente de cómo se ha construido Centroamérica: una sociedad fragmentada, que se desangra, rica y miserable a la vez, como lo es también América del Sur.

Chile ha visto este éxodo de personas hacia su territorio en diferentes ocasiones. Ocurrió con la migración peruana y colombiana y, actualmente, con las haitiana y venezolana. Sin embargo, no hemos sido capaces de integrarlos en todas las aristas de los derechos humanos. Si bien es cierto han existido avances, la falta de legislación en esta materia -actualmente se discute en el Congreso- hace que los migrantes estén sometidos a los lineamientos del gobierno de turno y no a una política de Estado.

Por ahora, queda esperar esta ley y desear que cumpla con los estándares más exigentes en materia de DD.HH. Mientras tanto, seguiremos regulados por actos administrativos, que finalmente generan más desigualdades.

Hoy Centroamérica demuestra qué ocurre cuando se construye sin contratos sociales de lo que se quiere y no quiere ser. Esos miles de migrantes nos gritan que en muchos lugares del mundo no se puede vivir con dignidad.

Carolina Huatay

Directora ejecutiva Fundación Promigrar Chile