Cambios en quórum de 2/3

Partido comunista


SEÑOR DIRECTOR

En el editorial del 21 de abril se critica el llamado que ha hecho el Partido Comunista a modificar el quórum de dos tercios para los acuerdos que adopte la Convención Constitucional. Es claro que este es un debate válido en el contexto de un sistema democrático, en que los diversos actores tienen el derecho y el deber de hacer sus planteamientos frente a la ciudadanía, que es finalmente quien resuelve.

El editorial mencionado estima que esa propuesta se apartaría por completo de los más elementales estándares democráticos. Por el contrario, el propósito es justamente reponer las normas que rigen en cualquier democracia sana, en que tienen poder vinculante los acuerdos de la mayoría, con pleno respeto de los derechos de las minorías. Los dos tercios en cambio no generan grandes acuerdos, sino el gobierno de una minoría.

Todos sabemos que los quórums elevados fueron uno de los cerrojos que estableció la Constitución de 1980 para impedir cualquier cambio profundo al modelo que impuso (sin ningún estándar democrático) la dictadura. Con este quórum, la derecha ha conseguido mantener un sistema sordo frente a las demandas populares, lo que explica el estallido social.

Restarle soberanía a la Convención y pretender digitarle a la usanza de la Constitución de 1980, junto con pretender que una minoría baste para rechazar normas que cuentan con el apoyo mayoritario del pueblo chileno se opone a la más mínima definición de democracia. En estos momentos, en que la ciudadanía desconfía fundadamente de las instituciones que nos rigen, es claro que reconocer a la Convención Constitucional la legitimidad que le pertenece, afianzada en el reciente plebiscito por un ochenta por ciento de los votos, es la única manera de obtener una Carta Fundamental que represente los anhelos de cambio que el pueblo reclama.

Marcos Barraza Gómez

Comenta

Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.