Corte Suprema y jueces de Rancagua

El pleno extraordinario al que fueron convocados los ministros de la Corte Suprema para resolver la remoción de tres jueces de la Corte de Apelaciones de Rancagua -acusados de graves prácticas de corrupción- dejó al máximo tribunal dividido, ya que por nueve votos contra ocho se resolvió mantener a los magistrados. El resultado, lejos de haber traído más certezas y tranquilidad a la ciudadanía, profundizó la sensación de incertidumbre, lo que lleva a preguntarse por qué la Corte Suprema se precipitó en dar este paso fallido, sin haber ponderado bien sus efectos.

Los jueces que convocaron al pleno buscaban hacer efectivo el artículo 80 de la Constitución, que permite al pleno determinar la remoción de un juez que ha mostrado mal comportamiento, previo informe del inculpado y de la Corte de Apelaciones respectiva. Aun cuando los cuestionamientos a los magistrados de Rancagua son plausibles -atendidos el cúmulo de irregularidades que han trascendido a la opinión pública-, el voto de mayoría estimó que decretar la expulsión sin esperar los resultados del sumario que instruye la propia Corte Suprema afectaba el debido proceso. Queda ahora la duda si en poder de la Corte Suprema obran otros antecedentes no conocidos para haber impulsado la remoción inmediata, lo que sería útil de despejar.

Puesto que también se encuentra abierta una investigación penal por parte del Ministerio Público respecto de algunos de los jueces de Rancagua, cabe preguntarse qué ocurrirá si dicho proceso termina en condenas y éstas son apeladas ante la Corte Suprema. Un escenario así configuraría un potencial caso complejo desde el punto de vista de las garantías de imparcialidad y el debido proceso.

Debido a la gravedad de las acusaciones que se han formulado, y las inesperadas divergencias que han surgido al interior del propio Ministerio Público en relación con este caso, es indispensable que el Poder Judicial se empeñe en asegurar un pronto esclarecimiento del caso, evitando actuaciones que confundan aún más.