Inconveniente pugna de instituciones

Junto con la buena noticia que implicó la aprobación de la reforma tributaria, a la par se observó un enrarecimiento del ambiente político en el Congreso, contribuyendo a profundizar el desprestigio en que ya se encuentra sumida la actividad política.

La controversia se inició apenas conocida la decisión del Partido Socialista de presentar una acusación constitucional en contra de la ministra de Educación -idea a la que progresivamente se han ido plegando distintos sectores de oposición-, trámite que se aplazó para comienzos de septiembre. Dicho anuncio provocó una dura reacción por parte de la vocera de gobierno, que emplazó al PS a explicar sus vínculos con el narcotráfico, en alusión a la controversia que se produjo en la comuna de San Ramón. Sus dichos provocaron una batahola, donde el PS "congeló" sus vínculos con el gobierno, en tanto que parlamentarios de oposición han decidido bloquear el acceso de subsecretarios y asesores a las comisiones, a modo de represalia, desatando una suerte de pugna entre poderes del Estado.

Nada gana el país con este tipo de reyertas, y por cierto cabría esperar que la sensatez se imponga a la brevedad. Es legítimo que unas declaraciones poco afortunadas puedan desatar la protesta -incluso la indignación- de los aludidos, por lo que sería bienvenida una clarificación; sin embargo, ello no justifica llegar al punto de alterar las reglas propias del funcionamiento del Congreso para propinar "castigos". Al bloquear a subsecretarios y asesores, necesariamente se perjudica la calidad y normal funcionamiento del proceso legislativo, constituyendo un abuso de la mayoría parlamentaria. Este proceder debe ser rectificado y abstenerse de ser utilizado como herramienta de presión.

Si en definitiva prospera la presentación de la acusación constitucional, el país será el llamado a evaluar la seriedad de sus fundamentos, pero ahora cabe que las distintas instituciones involucradas en esta pugna -Ejecutivo, Senado y Cámara de Diputados- superen cuanto antes esta inconveniente pugna.