Lo que vale son los principios

FOTO: LEONARDO RUBILAR CHANDIA/AGENCIAUNO


SEÑOR DIRECTOR

No se puede medir el rol del Senado en Chile por la contención antidemocrática que en su seno ejercieron los senadores designados, los que en conjunto con los legisladores de derecha, constituyeron una mayoría ilegítima, profundamente conservadora hasta 2006.

Tampoco parece legítimo y perdurable querer reducir artificial e indebidamente la representación parlamentaria de los partidos históricos que mayor gravitación tienen en el Senado de la República. Las correlaciones de fuerzas cambian con rapidez.

Lo que importa es la validez o no de una cámara legislativa que cumple un rol constitucional de revisión de lo obrado por la cámara de inicio de los proyectos de ley. En tal sentido, hay reiterados ejemplos que indican que el contenido de las leyes mejora y se enriquece. Aún más, la perdurabilidad de las conquistas y derechos sociales queda claramente resguardada cuando su revisión o término deba cruzar el trámite bicameral.

En concreto, una mayoría efímera en una cámara puede desbaratar conquistas sociales que demoró mucho tiempo lograr. Y los grandes objetivos de establecer derechos sociales que animan al proceso constitucional en curso estarán más resguardados si existe una Cámara de Diputados y un Senado.

Camilo Escalona

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