SEÑOR DIRECTOR
Las graves deficiencias que presentó el servicio de transporte público en diversos lugares del país para la elección presidencial, dejaron en evidencia las falencias de planificación existentes y la necesidad de contar con un sistema descentralizado.
La experiencia internacional lo avala, casos exitosos como Transport for London, órgano encargado de la estrategia y administración del transporte en buses, metro, trenes ligeros y tranvía en Londres, no son liderados por el Ministerio de Transportes, sino por una directiva designada por el alcalde de Londres, que equivaldría en nuestro caso al Gobierno Regional.
La gobernanza es clave para mejorar la movilidad de las personas, para entregar los beneficios de la prestación del transporte, en la mejor coordinación con los municipios, en la más directa operación, detección y solución en situaciones de emergencia de forma más eficiente.
Hoy por ley, solo el Ejecutivo puede transferir competencias; desde el próximo gobierno éstas también podrán ser solicitadas por los gobiernos regionales. Esto es concordante con la relevancia que el presidente electo, Gabriel Boric, ha dado a la descentralización, por lo que será la oportunidad para generar un traspaso gradual y acercar a los territorios las definiciones sobre la movilidad.
Pero esto debe ir acompañado de los recursos financieros y humanos necesarios, ya que también será el momento para integrar en las regiones otros servicios clave para la ciudad: el Programa de Vialidad y Transporte Urbano, Sectra, encargado de la planificación, y la Unidad Operativa de Control de Tránsito.
Se trata de un requerimiento que debería ser transversal para todos los gobiernos regionales y un buen paso para comenzar a configurar la verdadera y anhelada descentralización.
Paola Tapia Salas
Jefa División de infraestructura y Transportes
Gobierno Regional Metropolitano
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