Partido Socialista y obstruccionismo



El rechazo de los senadores del Partido Socialista (PS) a la nominación de la abogada Ángela Vivanco como nueva integrante de la Corte Suprema -propuesta hecha por el Presidente Piñera-, desencadenó una fuerte disputa política con sus partidos aliados, principalmente la DC y el PPD, estos últimos recriminándole que se había desconocido un acuerdo político para apoyar a Vivanco. Desde la DC se acusó que se habían roto las confianzas, mientras que el PPD optó por congelar por ahora su participación en algunas instancias de coordinación de la ex Nueva Mayoría.

Las explicaciones del PS para este rechazo han sido extrañas. Su dirigencia ha señalado que no había un "acuerdo" propiamente tal, pero especialmente han insistido en que en su condición de partido "feminista", le resulta imposible apoyar a una persona que ha sostenido posturas muy contrarias al ideario socialista, refiriéndose a que Vivanco alegó como abogada en contra de la ley que despenalizó el aborto en tres causales. Esta razón resulta desconcertante, porque supondría validar que los partidos únicamente apoyarían a candidatos a la Corte Suprema que coincidan con sus propios postulados o causas, lo que haría muy difícil buscar equilibrios y alternancias -como ha sucedido hasta ahora- en la nominación de jueces.

La causa "feminista" aparece más como un pretexto para disimular lo que parece ser la razón más de fondo, con un PS que parece haber optado por una línea de obstruccionismo y oposición frontal al gobierno. Distintas señales parecen confirmar esta nueva estrategia; una de las más evidentes fue su rechazo de plano a participar en las instancias de diálogo a las que convocó el Presidente sobre materias de interés nacional.

Es un hecho político de innegables implicancias que un partido de tanta tradición como el PS, que junto a la DC fue el eje histórico de la antigua Concertación, no muestre mayor interés en volver a reconstruir esos vínculos -deteriorados tras la fallida experiencia de la Nueva Mayoría-, y opte por posturas más intransigentes. Es llamativo que en el episodio Vivanco el PS se haya alineado con el Frente Amplio (FA), dando la impresión de que está encontrando más sintonía con este bloque antes que con sus antiguos aliados. Para efectos de lograr entendimientos en el Congreso, en todo caso, no es una buena noticia que se vaya consolidando un bloque sin disposición al diálogo.

Comenta

Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.