Cuarentena en imágenes: “He permanecido en un estado de espera constante”

Invitamos a distintas fotógrafas y fotógrafos a retratar su nueva realidad cotidiana durante la cuarentena. Esta es la mirada de Camila Valdés.




“Para mí la cuarentena ha sido quieta. He permanecido en un estado de espera constante. Por la noche duermo 10 horas, así que he podido descansar mi mente sin distracciones.

Vivo con una compañera que sabe mucho sobre nutrición y estar en constante retroalimentación con ella es algo que durante este tiempo he valorado mucho. Ha sido el momento para aprender-haciendo, pues cocinar es un proceso creativo y también crucial para nuestra salud. Esto me ha ayudado a sobrevivir y mantenerme cuerda en esta “noche oscura colectiva”.

Además tomo fotos. Durante el encierro he podido hacer algunos retratos y avanzar en lo que ya sé hacer. Eso sí, ahora estoy más interesada en utilizar un enfoque holístico para la formulación y creación de mi trabajo. Integrando las estructuras que me rodean y forman nuestra realidad, como las montañas, animales y plantas.

Las formas más simples de materia poseen un potencial de autoorganización. Esto me hace pensar profundamente en la “belleza del no saber” de este futuro misterioso y ambiguo.

Siento que ahora más que nunca necesitamos belleza. Necesitamos emocionarnos. A veces tienes que trabajar con lo que tienes, así que imagino un nuevo comienzo centrado en frecuencias importantes y no en el exceso de ruido al cual nos habíamos acostumbrados.

En estos momentos valoro mucho el silencio, la flexibilidad. Tengo la sensación de que pareciera que estamos en un tipo de escenario único en la vida que atravesamos colectivamente y que claramente tendrá un impacto emocional en todes nosotres.

De todos modos, siento que todo cambió antes de la pandemia. La agitación de octubre nos hizo necesario reevaluar lo que dábamos por sentado. Es por esto que tengo la esperanza que sea lo que sea que venga, lo vamos a poder navegar en todas sus formas y que entre todos construiremos un espacio seguro y justo para la humanidad, reconociendo existencias que ignorábamos. Esto es un despertar sin fin.

Camila Valdés (@nombreyforma) está pasando su aislamiento en una casa en Ñuñoa, acompañada de dos amigas con las que vive.

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