El diagnóstico de La Moneda al partido de Kast

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El gobierno analiza los pros y contras de que el Partido Republicano ingrese a Chile Vamos.


El inicio del proceso para la creación del Partido Republicano, liderado por el expresidenciable José Antonio Kast, no pasó inadvertido en La Moneda. El hito reabrió inmediatamente un debate que se había instalado cuando Kast formó su movimiento, pero que con el pasar del tiempo se había apaciguado: ¿Kast adentro o afuera de Chile Vamos?

El mismo lunes que se concretó el anuncio, el tema se conversó "por encima" en el comité político ampliado de La Moneda. Y aunque fuentes de gobierno aseguran que nunca se abordó "formalmente", revelan que durante la semana sí se conversó entre los ministros del comité político. De esos diálogos se desprendió una premisa: que ante la consulta sobre si el partido de Kast debía ingresar a Chile Vamos la respuesta sería que esa decisión recae en los partidos oficialistas.

"Chile Vamos tendrá que ver su situación con los nuevos movimientos o partidos que se formen (...) es un problema de nuestra coalición", aseguró por esos días el jefe de gabinete, Andrés Chadwick. Los titulares de la Segegob, Cecilia Pérez, y de la Segpres, Gonzalo Blumel, se manifestaron en la misma línea.

En La Moneda reconocen que en privado sí se han analizado los "pros y contras" respecto de la conveniencia de un eventual ingreso del Partido Republicano a Chile Vamos. "No hay una opinión unánime", aseguran en Palacio.

Dentro de las ventajas que perciben se encuentra el hecho de que se lograría "alinearlo", ya que debería cuadrarse "con las reglas" del bloque y dejaría de ser "un outsider".

Otra ventaja se constataría en el caso de que Kast quiera ser nuevamente candidato presidencial, ya que debería someterse a primarias y respetar ese resultado.

También ven "beneficioso" que forme parte del bloque en elecciones como las municipales, de gobernadores y parlamentarias, argumentando que "así hay mayor capacidad de movilizar a personas".

¿Un nuevo PC?

Por otro lado, dentro de las desventajas que vaticinan en el Ejecutivo se encuentran, por ejemplo, el permanente conflicto que se abriría con Evópoli, rivalidad que ya se ha expresado públicamente.

Otro temor es la posibilidad de que se repita un escenario como el ocurrido cuando el Partido Comunista se incorporó a la Nueva Mayoría, que generó un rechazo en los sectores de dicho bloque. Un panorama que, aseguran, podría replicarse con electores de centro que no comulgan con ideas de derecha dura.

En el gobierno recalcan que para el Presidente Sebastián Piñera el centro "es muy relevante" y que la más reciente prueba de ello es que nombró al ex DC y ex Ciudadanos Sebastián Sichel como ministro de Desarrollo Social.

Además, en Palacio indican que si el partido de Kast compite en las elecciones municipales por fuera de la coalición, podría provocar que Chile Vamos perdiera votos que tradicionalmente son de ellos. Y, por esta razón, algunos advierten que sí o sí debería considerarse, al menos, un pacto electoral.

De todas formas, en La Moneda aseguran que es un debate "muy prematuro", porque aún falta que el partido se constituya legalmente. De igual forma, señalan que la figura de Kast ha "ido perdiendo fuerza" y que la mejor prueba de eso es la encuesta CEP, donde su evaluación positiva cayó de 25% a 23% respecto de fines del año pasado.

Con todo, en La Moneda resienten las "críticas constantes" que hace Kast. Aseguran que dos de cada tres cosas que dice son cuestionamientos. De hecho, los ministros políticos refutaron esta semana la afirmación del exdiputado de que no se estaba cumpliendo el programa de gobierno. De manera paralela, Piñera -sin aludir a Kast- subrayó que es "muy consciente de los compromisos que adquirimos".

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