La reservada reunión entre Delgado y los exministros del Interior

El jefe de gabinete convocó a Andrés Chadwick, Gonzalo Blumel y Víctor Pérez a una reunión en su casa, cita que se realizó el lunes y en la que recogió experiencias de sus gestiones. En el encuentro también abordaron temas como el orden público y la situación en La Araucanía.


Cerca de las 21.00 del lunes, el ministro del Interior, Rodrigo Delgado, encabezó una cita reservada en su casa, ubicada en San Carlos de Apoquindo, en Las Condes.

Hasta ese lugar llegaron sus tres antecesores durante la segunda administración del Presidente Sebastián Piñera: Andrés Chadwick, Gonzalo Blumel y Víctor Pérez.

Los tres exministros dejaron el gabinete en medio de crisis políticas que atravesó el gobierno y que terminaron sellando sus salidas: el primero, en medio del estallido social; el segundo, luego de la aprobación del primer retiro del fondo de pensiones, y el tercero, renunció luego que la Cámara aprobara la acusación constitucional en su contra.

Según fuentes de gobierno, el encuentro -al que fueron convocados por el propio Delgado hace unos días- se trató de una cita de camaradería, pero también tuvo el objetivo de realizar un análisis político. Esto, en línea con lo que también hicieron Blumel y Pérez en su momento, quienes consultaron, en ocasiones, la opinión de sus antecesores al asumir en el cargo.

Las mismas fuentes dicen que en la cita -en la que también estuvo el subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli- sirvió para que Delgado recogiera las experiencias de sus antecesores para enfrentar su administración.

Así, pudieron abordar las dos grandes aristas del ministerio: orden público y coordinación política. En cuanto a lo primero, según las mismas fuentes, conversaron sobre la situación de La Araucanía y las manifestaciones que se han registrado en los últimos días, mientras que en lo segundo se abordó el escenario en el Congreso. Esto, en un contexto en que los hechos de violencia en esa región han recrudecido y los parlamentarios de Evópoli de esa zona mantienen las relaciones congeladas con el Ejecutivo a la espera de que anuncien un delegado para La Araucanía y que exista un nuevo plan, una materia en la que se encuentra trabajando el jefe de gabinete junto a otros personeros de Interior.

La reunión con los exsecretarios de Estado, además, se da a una semana de que Delgado cumpla un mes en el cargo y cuando aún continúa su proceso de instalación.

De hecho, en los pocos días que lleva ya recibió los primeros reparos de la centroizquierda, desde donde acusaron que ha habido pocos contactos por parte de Delgado para sostener encuentros con los timoneles de la oposición y los parlamentarios de La Araucanía, una visión que desestiman desde Interior.

En todo caso, durante la semana pasada el secretario de Estado agilizó los llamados a los timoneles de esas colectividades, pero aún falta que se concreten las citas. En Interior dicen que se estaban agendando, pero que desde la oposición manifestaron que preferían restarse por ahora tras el incidente ocurrido en Talcahuano, que provocó que un funcionario de Carabineros fuera formalizado por balear a menores en un centro del Sename.

Reuniones en el Congreso

Un día después del encuentro con sus antecesores, el ministro del Interior se trasladó ayer por segunda semana consecutiva al Congreso, en Valparaíso.

El objetivo fue reunirse con la presidenta del Senado, Adriana Muñoz (PPD), y el titular de la Cámara de Diputados, Diego Paulsen (RN).

En Interior afirman que ambas citas se enmarcan dentro del proceso de reuniones que está sosteniendo Delgado con los distintos poderes del Estado. Por ejemplo, la semana pasada hizo lo propio con el fiscal nacional y con el contralor general de la República.

Los encuentros, según afirman en la cartera, tuvieron el objetivo de transmitirles a los presidentes de ambas cámaras que el gobierno tiene la disposición de fortalecer los caminos del diálogo y evitar la polarización. En la instancia, además, Delgado expresó su preocupación por lo que, a su juicio, es un debilitamiento de las instituciones, que se ha generado con la presentación de un total de 11 iniciativas impulsadas desde el Congreso que, según La Moneda, intentan saltarse la institucionalidad vigente.

Tras el encuentro, el jefe de gabinete comentó que “esta reunión está en el marco de una reunión pendiente, una reunión protocolar; abordamos varios temas, seguridad y temas de contingencia”.

Las citas se produjeron en un escenario en que el ambiente entre La Moneda y el Congreso ha estado polarizado y se ha recrudecido por la decisión del Presidente Piñera de acudir al Tribunal Constitucional por el proyecto de la oposición que busca permitir un segundo retiro de pensiones. De hecho, la senadora Muñoz advirtió ayer que no iba a poner en tabla el proyecto del gobierno en la materia, sino que solo la reforma constitucional de la centroizquierda. Delgado, de hecho, fue consultado sobre si abordaron este asunto y lo descartó.

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