Columna de Adriana Noreña: “Privacidad y seguridad online ¿un reto imposible?”

Hace unos días, mientras miraba los resultados de una investigación que realizó Google para entender el impacto en las personas sobre temas relacionados con su privacidad en línea, recordé a Stan. ¿Quién es Stan? Es la réplica de un dinosaurio terópodo que “vive” en la entrada de nuestras oficinas centrales en Mountain View, California; que diariamente nos recuerda que evolucionar y adaptarse es imprescindible para sobrevivir.

Un 80% de las personas en Chile están preocupadas por su privacidad y seguridad en línea. Ignorar este dato, representaría todo un riesgo para nuestra supervivencia, y muestra con claridad que el mundo de la publicidad quiere que su negocio y el de las marcas anunciantes sea sustentable, necesita innovar y colaborar para satisfacer estas expectativas.¡Gracias Stan!

Invertir tiempo, esfuerzo y dinero para proteger la privacidad de las personas en la web es esencial. Para nosotros, esto significa ser totalmente transparentes con quienes usan nuestros productos, y darles todas las posibilidades para que puedan decidir qué datos personales compartir, cuándo y a quién.

Pero sabemos que esto no es suficiente, ya que un poco más del 74% de las personas en Chile creen que es importante tener una experiencia personalizada cuando compran por internet. Entonces ¿Cómo garantizar las exigencias de privacidad individual y, al mismo tiempo, ofrecer a cada cliente una experiencia personalizada?

El aprendizaje automático o machine learning es una herramienta esencial para dejar de ver las nuevas expectativas sobre privacidad como una amenaza y transformarlas en una oportunidad. Gracias a la capacidad única para procesar millones de señales en pocos segundos y aprender de ellas mediante sistemas de inteligencia artificial, podemos tener la posibilidad de personalizar cada vez más la comunicación publicitaria, usando al mismo tiempo, cada vez menos datos de las personas a las que mostramos los anuncios.

Hay tres claves para hacer crecer los negocios en un mundo que ha hecho de la privacidad una prioridad no negociable. La primera, fortalecer la relación con clientes y posibles clientes obteniendo su consentimiento para el uso de sus datos. La segunda, aprovechar al máximo las herramientas publicitarias basadas en el aprendizaje automático. Y la tercera es usar las nuevas tecnologías publicitarias, que sin rastrear individualmente a las personas en Internet permiten ofrecerles experiencias relevantes y personalizadas.

Es necesario cambiar la mentalidad con la que se hicieron los negocios online hasta hace poco tiempo. Lo que está en juego es el activo más valioso de una corporación: la confianza de su público. Y en Chile, un 84% de los usuarios declaran que la transparencia sobre los datos que se recopilan es fundamental para ser leales a una marca. La lealtad se basa en la confianza.

Stan nos recuerda que ante cada gran cambio hay quienes se adaptan y quienes no. Sabemos de eso y, tenemos claro que entender las nuevas expectativas sobre privacidad y ponerlas en el centro de las estrategias futuras es una cuestión de supervivencia.

* La autora es vicepresidenta de Google Hispanoamérica