Un capítulo final ahora feliz para Cornershop, tras su fracasada venta a Walmart

"No estamos buscando vender la empresa, nuestro foco es seguir construyendo Cornershop". Con esas palabras, en agosto, Daniel Undurraga, uno de los tres socios del emprendimiento, contaba a PULSO los planes de la compañía luego que las autoridades mexicanas decidieron no aprobar en junio la adquisición de la conocida aplicación de última milla.

De ahí la sorpresa por el anuncio de esta mañana de que la plataforma de transporte Uber llegó a un acuerdo para adquirir la participación mayoritaria de la startup chilena ligada a Undurraga, Juan Pablo Cuevas y Oskar Hjertonsson.

La compra de Uber representa un inesperado final en una historia de que la hasta ahora se pensaba que México era el capítulo final -y no precisamente feliz- de la venta del emprendimiento a la gigante supermercadista estadounidense Walmart.

El negocio por US$ 225 millones -que en su momento fue catalogado como la operación del año- se anunció en septiembre de 2018 e implicaba generar una alianza regional y entrar a más países, entre los que se mencionó a Canadá. Pero Cofece, el regulador de competencia de México, decidió rechazar la operación al considerarse que generaba una integración vertical que dañaba el buen funcionamiento de los mercados.

Cornershop es un ícono en el ecosistema de emprendimiento chileno con proyección internacional

Fue en 2015 cuando los socios -que previamente habían creado Needish y Clandescuento, vendido a Groupon en 2010- lanzaron una aplicación que permitía comprar productos de manera rápida y tenerlos en tu hogar en 60 minutos

La idea había surgido cuando Undurraga y Hjertonsson se encontraban viviendo en San Francisco -justo donde hoy Uber realizó el anuncio-, y Cuevas estaba en Chile como CEO de Groupon para Latinoamérica (menos Brasil).

Levantaron así capital como accionistas como los fondos Accel Partners, Creandum, Jackson Square Ventures y ALL VP. Y le dieron el puntapié inicial a Cornershop tanto en Chile como en México. Y fue ahí donde puso sus ojos el principal retailer del mundo: en una plataforma con alta tecnología, presente en ciudades chilenas, mexicanas, canadiese y peruanas, con más de 10.000 shoppers en sus operaciones.