La última carta de la Bolsa de Valparaíso para evitar su cierre:  "Para ser viables se necesitan aportes del gobierno regional"

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Panorámica del puerto de Valparaíso.

Esperan obtener dichos recursos de la mano del arriendo de su edificio, ubicado en el centro de la ciudad, que lo avalúan en $ 2.500 millones. La CMF podría ordenar la liquidación de la firma, o bien darles los dos años que piden para reinventarse como Bolsa de Emprendimiento.


La Bolsa de Corredores-Bolsa de Valores de Valparaíso, más conocida por sus siglas, Bovalpo, está agonizando. La plaza bursátil más antigua del país, que inició sus operaciones en 1892 y abrió paso de forma pionera al corretaje de títulos financieros como acciones, bonos y letras de cambios en nuestro país, está pidiendo ayuda para poder sobrevivir.

En el mercado de capitales local, distintas fuentes coinciden en que la Bovalpo estaba moribunda hace unos 15 años, pues hace mucho tiempo que no logra el 1% total del mercado de transacciones de instrumentos de valores del país, que hoy se concentran en más del 90% en la Bolsa de Comercio de Santiago (BCS) y, en menor medida, en la Bolsa Electrónica de Chile (BEC). Bovalpo transa valores diariamente entre $ 5 millones y $ 50 millones, versus la BCS, que mueve al día volúmenes en torno a $ 1 billón.

Sin embargo, es durante este 2018 que el riesgo de vida de esta institución aumentó, dado que entre las exigencias legales para poder funcionar como Bolsa de Valores, se necesita un mínimo de 10 corredoras dentro de la plaza bursátil. Actualmente, Bovalpo tiene seis y, de ellas, solo dos están operativas: Dupol y STF Capital.

Casos de fraude y estafas que se investigan actualmente en la Justicia (ver recuadro), sumado a poca competitividad lastraron a que el parqué porteño sufriera el éxodo de corredoras en el último año. En abril la intermediaria Banglobal anunció su cancelación voluntaria por razones de competitividad, con lo que quedaban nueve corredoras nominalmente. Fue en ese instante que el directorio de la Bolsa encendió sus alarmas y se reunió con el presidente de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), Joaquín Cortez, para expresarle su preocupación por el hecho y tratar de buscar una solución. Luego de eso, la corredora ICB y Pluskapital siguieron los pasos de Banglobal. Quedaban siete intermediarias. El mes pasado y luego de que estallara un caso económico por infracciones a la Ley de Valores, la CMF le canceló la inscripción a la corredora Intervalores, ligada a Gabriel Urenda. Con esto quedaban seis.

No existe un accionista mayoritario de Bovalpo. Su capital social está compuesto de 60 acciones suscritas y pagadas que totalizaban un capital de $ 705.584.000. Nominalmente, el mayor accionista es LarrainVial Corredora de Bolsa (por cuenta de terceros), que tendría tres acciones o el 5% de la propiedad.

La realidad financiera de la plaza bursátil de Valparaíso es compleja. En los últimos años solo ha sabido de números rojos. A modo de ejemplo, en 2017 perdieron $ 8.669.000 y en 2016 hicieron lo propio por $ 24.169.000. Además, la institución les debe dinero a sus directores por dietas que totalizan los $ 132.407.000, y tiene deudas de créditos por un total de $ 228 millones con el Banco de Chile y Scotiabank.

Una fuente importante de recursos de Bovalpo son los alrededor de $ 40 millones anuales que perciben por el concepto de arriendo y garantías de arriendo de su edificio a otras instituciones. El costo de operación de Bovalpo en 2017 fue de $ 307 millones ($ 126 millones en remuneraciones) y los gastos de administración fueron de $ 80 millones.

Una de las grandes salidas que asoman para la Bolsa es tratar de reinventar su modelo de negocios y para ello necesita recursos frescos y tiempo. Eso es lo que están intentando lograr con las autoridades económicas del país y una carta bajo la manga sería traspasarle al Estado su histórico edificio ubicado en la calle Arturo Prat, en pleno centro de Valparaíso. El terreno, el edificio y todos los muebles y equipamientos de la Bolsa de Valparaíso están avaluados en $ 1.036.933.000, pero su presidenta, Gloria Apara, en entrevista con PULSO asegura que tiene un precio mucho más alto. Aquí hace su diagnóstico del caso, lanza dardos contra la Bolsa de Comercio y pide ayuda al Estado. Es su último as bajo la manga.

¿A qué se debe la situación crítica de la Bolsa de Valparaíso?

-El cierre de la Bolsa de Valparaíso (1983-1988) le significó perder en esos años el 50% de su participación en el mercado de renta variable y de 70% en renta fija, la cual adquirió la Bolsa de Santiago sin ningún esfuerzo, y cuando Valparaíso reabre sus puertas, la BCS se negó a reanudar las operaciones como se hacían antes, imponiendo así un 'peaje' a las órdenes interbolsas provenientes de Valparaíso, con la finalidad de mantener la concentración de los negocios en su centro bursátil y consolidar su supremacía en el mercado. Este peaje encareció el costo de operación de los corredores de Valparaíso, lo que hizo emigrar a sus clientes a otros corredores de Santiago. La falta de clientes hizo inviable sus ingresos, obligándolos a cerrar paulatinamente sus puertas hasta llegar a la crítica cantidad actual.

Para revertir esto, ustedes han empujado a que las bolsas se interconecten como la solución a la competencia, lo que fue respaldado por el TDLC, ¿por qué la BCS y el regulador de valores no han impulsado esto?

-No obstante la claridad de las resoluciones de los tribunales, hoy en día la BCS no las cumple, en desmedro de sus competidoras y de los intereses de los inversionistas, quienes deben aceptar que las operaciones no se realicen al mejor precio, lo cual no habría sucedido si esta hubiera acatado el imperativo esencial contenido en los fallos y si la antigua SVS hubiera impuesto su autoridad para obligar a que estos fallos se cumplieran, tal como a ella misma se lo ordenaron no estaríamos en la situación en que nos encontramos.

¿Cómo ha influido en el devenir de la Bolsa que tanto Carlos Marín como Gabriel Urenda, que están siendo investigados por millonarias estafas, hayan sido directores de la Bolsa de Valparaíso hasta hace poco?

-El caso Marín y el Urenda provocaron un profundo impacto, tanto al interior de la Bolsa como en la región, por el peso y el prestigio que tenían en la zona y por el hecho de pertenecer a familias tradicionales y conocidas. Sin embargo, no se puede generalizar e identificar a todos los corredores con estos casos particulares, porque son casos aislados y porque la Bolsa jamás ha tenido algún problema relacionado con prácticas irregulares o ilícitos. Es más, hemos ejercido duramente nuestra facultad de control y fiscalización de los corredores, aun sin disponer de los ilimitados recursos que tiene la Bolsa de Santiago, la cual ha tenido más casos de este tipo.

El público y la autoridad entienden que ninguna medida es suficiente si estas operaciones irregulares e ilícitas se cometen en las sombras y montando toda una maquinaria para evitar ser descubiertas. Tanto es así, que en ambos casos ni siquiera la CMF pudo detectarlas, pese a sus continuas auditorías y controles.

Tienen plazo hasta septiembre para regularizar la cantidad de corredoras para poder seguir funcionando. ¿Qué rol tiene la CMF para encontrar otra solución?

-Es absolutamente imposible cumplir la norma para septiembre. Tampoco podemos implementar en ese breve plazo un plan de funcionamiento, porque dependerá de la decisión de la autoridad sobre el futuro de la Bolsa. Necesitamos tiempo para terminar el proyecto que permita reposicionarla en el mercado, y para ello es indispensable contar con el apoyo técnico y ayuda de la autoridad. Hoy en día está en manos de la CMF pronunciarse sobre nuestra solicitud de prórroga de plazo de existencia por dos años, enviada el 18 de julio pasado.

¿Qué caminos de resolución tendría en septiembre la CMF con Bovalpo?

- La CMF tiene dos opciones: autorizar a la Bolsa para seguir funcionando con un menor número de corredores, o bien, revocar su autorización de existencia, en cuyo caso debe proceder a su liquidación, pudiendo delegar esta función en uno de sus funcionarios a su cargo, o bien, autorizar a la Bolsa para realizar su propia liquidación.

¿Qué soluciones concretas ve usted a este problema?

- Es urgente introducir una modificación al artículo 44 bis de la Ley de Valores, que impida la discrecionalidad en la transmisión de la información, como ha ocurrido hasta ahora, y obligue, de manera perentoria y categórica a todas las bolsas a interconectarse entre sí, en tiempo real, llevando todas las órdenes a la rueda, sean propias o provenientes de otras bolsas, de manera que sean vinculantes y obligatorias para permitir el calce automático y la mejor ejecución de las órdenes de los inversionistas.

Además, a fin de evitar que la interconexión obligatoria no se torne ilusoria e impedir que vuelva a ser ignorada o burlada mediante subterfugios legales, es indispensable que la nueva norma otorgue un plazo máximo a las bolsas para implementar esta interconexión, y además, es de suma importancia que no se les impongan a los corredores de otras bolsas, ni a estas, y de manera arbitraria, exigencias económicas que vayan más allá de las que la propia ley contempla, impidiéndoles con estas imposiciones fácticas llevar y concretar efectivamente sus órdenes a otras ruedas, manteniendo la asimetría que existe actualmente en el mercado y la ausencia de competencia, igualdad y transparencia.

Además, necesitamos recursos para operar.

¿Cómo piensan obtener financiamiento?

- Para ser viables se necesitan aportes del gobierno regional, que estamos proponiendo a la autoridad sea bajo el arriendo de un gran porcentaje del edificio institucional a algún organismo público, en el cual siga funcionando la Bolsa, con lo cual se evitaría que este edificio emblemático y de importancia histórica para la ciudad pase a manos de privados, ya que es inevitable que la disminución de sus ingresos le impedirá pagar los créditos a sus acreedores, siendo inminente el riesgo de que salga a remate, y quede en manos de terceros ajenos a los intereses de la región, lo cual debe evitarse a toda costa, considerando que su valor supera los $ 2.500 millones.

¿Piensan acudir a otras autoridades para un salvataje?

- Hemos sostenido reuniones con autoridades regionales, acordando formar mesas de trabajo y esperamos reunirnos la próxima semana con el ministro de Economía, don José Ramón Valente.

¿Cuál es el plan para reinventarse como Bolsa?

- La administración está empeñada en rediseñar el negocio en términos de especializar la Bolsa y transformarla en una Bolsa del Emprendimiento, en la cual se transen títulos y valores que permitan levantar capital a las pymes y emprendedores. Todo con un sistema de garantías que podrían ser proporcionado por las empresas securitizadoras y otras similares, profundizando el mercado con una nueva área de negocios y de instrumentos de intermediación financiera. Estábamos en esta línea de trabajo, e incluso habíamos firmado un acuerdo de cooperación con el Mercado Argentino de Valores.

MARÍN Y URENDA, LOS EXDIRECTORES DE BOVALPO QUE SON PERSEGUIDOS POR ESTAFAS

-Entre Carlos Marín y Gabriel Urenda, ambos exdirectores de la Bolsa de Valparaíso, suman alrededor de $ 10 mil millones en querellas por estafa y apropiación indebida, entre otras imputaciones que son perseguidas por el Ministerio Público.

Marín habría perpetrado los delitos mientras era presidente de Bovalpo a través de su corredora, que llevaba su nombre. Los afectados serían casi 100 personas. Su caso está siendo investigado por la Unidad Anticorrupción de la fiscalía porteña.

Actualmente, el extimonel de la Bolsa dispuso de todas sus propiedades para que sean rematadas y, de esta forma, resarcir a las víctimas. Sin embargo, los bienes no alcanzarían para compensar la magnitud del monto defraudado.

Una veta desde donde Marín podría obtener más recursos proviene de la propia Bolsa de Valparaíso, dado que en los estados financieros de la institución se revela que actualmente existe una pugna por una supuesta deuda de $ 313 millones que tendría el parqué a favor de Carlos Marín Orrego Corredores de Bolsa y caratulan la deuda con el concepto de "asesorías entre 2002 y 2007". La presidenta de Bovalpo niega que esta deuda sea válida.

En tanto Urenda, quien estaba en el directorio de Bovalpo desde 2011, habría afectado a alrededor de 50 personas por un monto de alrededor de $ 8.000 millones. Apenas estalló el caso, la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) le bajó el telón a su corredora de valores. Una tesis es que parte de los dineros defraudados está en EE.UU. y en el mercado hay quienes sostienen que habría lavado de dinero.

De todos modos, este no es el único capítulo oscuro donde han estado envueltas corredores de Bovalpo. En 2016, el dueño de la intermediaria Essex, Luis Mella, estuvo involucrado en demandas por lavado de activos y tráfico de oro.

CMF EXIGE MAYOR DETALLE AL PLAN DE REORIENTACIÓN DE LA PLAZA BURSÁTIL 

Ante la petición que Bovalpo le solicitó a la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) de autorización para funcionar durante el plazo de dos años con un número inferior de corredores del mínimo legal que establece la norma, el regulador respondió mediante oficio que antes de pronunciarse sobre esta materia, requieren que la administración del parqué porteño entregue una propuesta detallada de su plan de reorientación o reconversión.

La CMF refuta en su oficio que Bovalpo tenga dos corredores operando. Aseveran que solo hay uno. Por lo mismo, le piden a la administración que señale "si la Bolsa espera contar con un número mayor de corredores, indicar cuál sería ese número de corredores, dentro de qué plazos y cuál será el plan de acción para aumentar su número de corredores en operación. Así, también, deberá señalar si el número de seis corredores miembros, en atención a sus proyecciones, podrá ser mantenido en el tiempo señalado en su solicitud".

¿Con qué plata se interconectarían?

Está claro que la entidad porteña pide fuerte y claro que las bolsas del país se interconecten, de hecho su presidenta desliza que la inercia respecto de este tema por parte de la BCS y el regulador es un factor más que explica la delicada situación que atraviesa la centenaria firma.

Sin embargo, la CMF en su respuesta sostiene que Bovalpo "no ha indicado a este servicio de qué forma y qué planes y medidas implementaría, a efectos de asumir los costos que implicaría la interconexión de los centros bursátiles del país en los términos indicados".

En atención a lo anterior, la CMF agrega que la Bolsa deberá informar "las medidas que adoptaría Bovalpo a efectos de asumir los costos que implicaría la interconexión que menciona en su solicitud".

El hecho de que la Bolsa pida aportes a entidades gubernamentales regionales también le hizo ruido al regulador, es por esto que les piden informar si existen acuerdos suscritos o negociaciones en curso con el mencionado gobierno regional, indicando los montos, las condiciones y los plazos por los cuales se extenderían el o los acuerdos. También exigen que la entidad detalle qué medidas adoptará si esos aportes regionales no se llegaran a concretar.

Otros detalles fundamentales que exige la CMF es sobre la idea de que Bovalpo se transforme en la Bolsa del Emprendimiento. Frente a ello, solicitan que se especifique: instrumentos que serían transados, segmento de empresas e inversionistas al que se dirigiría el proyecto, estimación de corredores que participarían y eventuales tratativas ya realizadas, propuestas de modificaciones legales o normativas necesarias, necesidades de nuevos sistemas y procesos, cronograma con principales hitos y plazos asociados, costo del proyecto y mecanismo de financiamiento, experiencias similares en mercados nacionales o internacionales y, finalmente, eventual competencia y diferencia con otros proyectos de emprendimiento similares.

La respuesta al oficio de la CMF (que fue firmado por el intendente de supervisión del mercado de valores, por orden del presidente de la CMF) deberá ser remitida dentro de 30 días corridos desde su notificación, es decir, a fines de agosto.P

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