El tiempo en SQM pasó rápido y 2022 será un año en que vencen ciertas restricciones para sus accionistas principales. Una de ellas es la que impide desde 2018 al grupo que controla Julio Ponce votar libremente por un presidente de su predilección para dirigir la mesa de SQM.

La restricción fue establecida hace cuatro años: el acuerdo entre Corfo, el grupo Pampa Calichera y SQM mediante el cual el fisco otorgó nuevos derechos de explotación a la minera en el salar de Atacama impuso a Ponce ciertas prohibiciones en materia de gobierno corporativo.

A cambio de ampliar la capacidad de producción de litio, con nuevas tasas de pago al Estado, Julio Ponce debió aceptar que ni él ni sus parientes cercanos -hijos y hermanos- estuvieran en cargos directivos y ejecutivos de SQM hasta 2030. Pero además, para viabilizar el acuerdo, Pampa Calichera, su vehículo de inversión en SQM, se comprometió a otra cosa: votar como presidente a un director independiente, con acuerdo de Corfo.

Alberto Salas, presidente de SQM.

El elegido fue Alberto Salas, ingeniero civil en minas, expresidente de la Sonami y de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), cuyo nombre fue visado por Corfo y por la propia Presidenta Michelle Bachelet en esa época. Esa obligación, sin embargo, termina el 31 de marzo de 2022. Así, tras la renovación de directorio de abril próximo, Pampa podrá votar libremente por el presidente de SQM.

En el grupo Pampa creen que aún es temprano para resolver quién será el presidente de SQM a partir de 2022 y algunos creen que la decisión se discutirá recién después de las elecciones de este domingo. Los acuerdos de 2018 sobrevinieron tras el escándalo de los pagos políticos que estallaron en 2015 y en esas negociaciones, al final del segundo de gobierno de Michelle Bachelet, Ponce se allanó a retirarse de la primera línea. En estos cuatro años, analizan en el entorno de la minera, SQM ha podido salir de las polémicas: nominar un nombre demasiado relacionado con Ponce podría volver a situar a la empresa en pantalla gigante. Sobre todo, con un gobierno de izquierda. “Podría ser un ruido innecesario”, analiza un profesional ligado desde hace años a la minera.

El cargo de presidente es emblemático en SQM. Entre 1987 y 2015, hasta que estalló el escándalo de los pagos irregulares, lo ocupó Julio Ponce. En abril de 2015, Ponce dejó la presidencia y fue reemplazado por Juan Antonio Guzmán, un empresario que fue ministro de Educación de Augusto Pinochet. Estuvo un año: en 2016 lo sucedió Eugenio Ponce, el hermano menor de Julio Ponce, quien estuvo en SQM hasta que los acuerdos con Corfo lo dejaron fuera. Hoy es asesor externo. A Ponce lo reemplazó Alberto Salas.

Patricio Contesse Fica, vecepresidente de SQM.

Hoy el directorio está formado por ocho personas, elegidas en 2019, cuyo período concluye en abril de 2022. El grupo Pampa postuló en la última junta de accionistas a Alberto Salas como independiente y a Hernán Büchi, exministro de Hacienda, director de SQM desde 1993, y Patricio Contesse Fica, brazo derecho de Julio Ponce y hoy vicepresidente de la compañía. El nombre de Contesse, abogado e hijo del histórico exgerente general de SQM, circula como posible nuevo presidente.

Contesse, de 38 años, es hoy el asesor más estrecho de Julio Ponce, es vicepresidente de las cinco sociedades cascadas y administra también el trust mediante el cual el excontrolador de SQM participa en la propiedad de la compañía. “Es muy prematuro aún. No está decidido”, dice una persona ligada a SQM. Todo se resolverá en abril. Pampa, eso sí, debe seguir eligiendo al menos a un director independiente hasta 2030.

El tema de la presidencia, respondió el vicepresidente ejecutivo de Corfo, Pablo Terrazas a Pulso, no formó parte de los contratos con SQM, sino que fue materia de un compromiso unilateral sobre gobiernos corporativos de SQM y, en especial, “del Grupo Pampa, en donde Corfo estuvo conforme con el planteamiento de un presidente de la compañía que fuera independiente hasta marzo de 2022″. Terminado el plazo, no es algo que Corfo pretenda revalidar.

“Este es un tema que deberá analizar en su mérito la nueva administración que llegue a la Corfo en marzo de 2022. A la fecha, se ha dado cumplimiento a dicho acuerdo y estamos conformes con lo realizado”, agrega Terrazas.

El rol de Tianqi

Otra opción que personas ligadas a la minera no descartan es que algún representante de la china Tianqi, el otro socio relevante de SQM, con el 23,75% de las acciones, pueda elegir al presidente.Sin embargo, ese cargo tiene un rol dirimente en caso de empate y, aunque las decisiones en SQM suelen ser unánimes, por lo mismo es muy poco probable que Ponce ceda ese derecho.

En 2019, Tianqi propuso a tres candidatos, dos de ellos chilenos. A SQM llegaron el socio de Asset Chile Georges de Bourguignon y el abogado de Carey & Cía. Francisco Ugarte, quienes habían asesorado a la china en su desembarco en Chile, una operación en la gastó más de US$ 4.000 millones. Ambos siguen ahí. El tercero era Robert J. Zatta, un ejecutivo estadounidense con experiencia en empresas mineras, como Rockwood Holdings.

Zatta, sin embargo, renunció hace una semana, porque prefería no viajar con frecuencia a Chile y optó por dejar SQM ahora que, pasado lo peor de la pandemia, la compañía podría optar por hacer más sesiones y actividades presenciales. La salida de Zatta fue comunicada el lunes y Tianqi ya tendría definido a un sucesor de similares características: un ejecutivo internacional con experiencia en alta administración de empresas. Probablemente el nombre sea propuesto en la próxima sesión de directorio para su designación y posterior ratificación en la junta anual ordinaria de accionistas de abril.

Tianqi tiene una restricción, dada su presencia en otras empresas que participan en el negocio del litio, tras un acuerdo al que llegó con la Fiscalía Nacional Económica en 2018: la firma no puede designar ejecutivos suyos como directores de SQM por un plazo de cuatro años, renovable por otros dos. Por eso los tres independientes. Pero al cabo del cuarto año, a fines de 2022, Tianqi podría pedir a la FNE la revisión de esa prohibición.

“Una vez concluyan estos cuatro años, lo natural es hacer un nuevo balance de la industria global del litio en 2022 versus lo que había en 2018. Si luego de esta evaluación creemos que las condiciones del mercado han cambiado de manera tal que las restricciones contenidas en el acuerdo con la FNE ya no tienen mayor justificación, podríamos eventualmente discutir el asunto con la FNE”, respondió hace un mes el nuevo CEO de Tianqi, Frank Ha, a Pulso sobre ese tema. Ha vino a Chile por primera vez en noviembre, ocasión en la que se reunió con autoridades locales como el ministro de Minería, Juan Carlos Jobet, y conoció personalmente a su socio, Julio Ponce, en una reunión privada.

Los otros directores de SQM son el abogado Gonzalo Guerrero, quien fue postulado por la japonesa Kowa, compañía que tiene un estratégico porcentaje en la serie A -que elige a siete de los ocho directores- y hasta 2018 tuvo un pacto con Julio Ponce que debió deshacer para sellar el acuerdo con Corfo, y el exministro de Minería Laurence Golborne, director independiente electo por la serie B que fue apoyado por Calichera también en 2019.

SQM es la empresa de mayor valor bursátil hoy en Chile, con más de US$ 16 mil millones, y hasta septiembre había ganado US$ 263 millones. La próxima semana, sus accionistas votarán un reparto de utilidades acumuladas por US$ 400 millones, cifra que será imputada luego a los resultados de 2021.

Tres aristas del pacto Corfo-SQM: el pago al Fisco, las comunidades y Maricunga

El acuerdo que en 2018 pactaron SQM y Corfo, entonces dirigida por Eduardo Bitrán, otorgó a la minera nuevos derechos mineros para extraer hasta 349 mil toneladas de litio adicionales a las 180 mil toneladas de litio que tenía como cuota hasta 2030. A cambio, además de las cesiones a las que fue forzado Julio Ponce, SQM comprometió aumentar el pago de arrendamiento de las pertenencias que, dependiendo del precio, puede subir hasta el 40%.

Pablo Terrazas, vicepresidente ejecutivo de Corfo. Mario Tellez/La Tercera

A cuatro años del pacto, Corfo afirma que desde abril de 2018 al tercer trimestre de este año, SQM Salar, la filial que opera los derechos, un total de US$ 345,9 millones bajo las nuevas tasas de arrendamiento. “SQM Salar S.A. ha ido cumpliendo con los compromisos establecidos en los contratos y en los diversos ámbitos que este abarca”, explica Pablo Terrazas, vicepresidente ejecutivo de Corfo a Pulso.

Además de las nuevas tasas, Terrazas menciona la materialización de inversiones para expansiones de planta productiva destinada al aumento de producción de productos de litio grado batería, para cerrar 2021 con una capacidad total de 120.000 toneladas de carbonato de litio equivalente.

El pacto permitía además a Corfo requerir a SQM “la evaluación conjunta de un proyecto” con una firma estatal en el salar de Maricunga. Terrazas dice que Corfo ha realizado las gestiones para viabilizar esa opción entre Codelco y SQM. “El plazo vence el primer semestre del 2022 y la información que tenemos a la fecha es que Codelco no ha descartado el interés de tomar esta opción y entendemos que, este último tiempo, han estado enfocados principalmente en consolidar la implementación del CEOL del cual es titular en Maricunga y analizar la situación con los otros titulares de proyecto en ese mismo salar”, explica Terrazas.

Por último, SQM debía realizar otros aportes. Uno, pagar a Corfo hasta US$ 18,9 millones al año para investigación y desarrollo. “Para I+D ya se ha comprometido, mediante adjudicaciones y licitaciones, cerca del 93% de los recursos según contrato”, dice Terrazas. Dos, aportes para desarrollo regional. Y tres, entre US$ 10 millones y US$ 15 millones para las comunidades aledañas al salar deAtacama.A cuatro años del pacto, SQM ha dispuesto de los fondos, pero Corfo aún no los ha distribuido, dicen personas ligadas a SQM. “No depende de nosotros”, decía el director Gonzalo Guerrero, en junio.

Terrazas dice que hay avances. “Respecto a los aportes acumulados a la fecha, ya se ha comprometido cerca del 60% de estos recursos con las comunidades de la cuenca del salar de Atacama”, afirma a Pulso.