Reportar bajo la mirada ESG: ¿dudas?

CMF denuncia por presuntos delitos de estafa a entidades que ofrecen créditos en sitios web

Chile parece no dar suficiente valor a los mensajes que entregan los organismos internacionales a través de sus estándares y buenas prácticas.


La Comisión para el Mercado Financiero anunció una serie de cambios a la Norma 386 para ampliar la información que las compañías reguladas por el organismo deberán incluir en sus memorias financieras en materia de Responsabilidad Social y Desarrollo Sostenible.

Si bien hubo muchos elogios, surgieron “dudas” entre las empresas frente al nuevo procedimiento. Dudas es un eufemismo para decir que no se está del todo de acuerdo con la nueva propuesta. Esto, posiblemente esté vinculado con las dificultades del mundo privado en evaluar los beneficios del “hacer lo correcto” en términos del comportamiento sustentable, en parte por una suerte de encapsulamiento local frente a lo que pasa en las economías de vanguardia. Chile parece no dar suficiente valor a los mensajes que entregan los organismos internacionales a través de sus estándares y buenas prácticas.

El resultado de esa “resistencia” es que aquello que no se hizo a tiempo, de manera paulatina, controlada y planificada, debe asumirse ahora de manera sobreviniente, abrupta y obligatoria.

El desafío es cómo asumir genuinamente el espíritu de la letra de la mirada ESG, más que el contenido que deberán tener las memorias y reportes. Tanto en las empresas como en los equipos que trabajan en este campo, hay una cierta obsesión con el instrumento más que con las conductas corporativas que se reportan. Es como si el estándar GRI o cualquiera otro que se utilice fuese el fin en sí mismo, cuando lo que creo entender de la decisión de la CMF, es que lo relevante es la toma de conciencia de que el enfoque ESG debería haber estado hace rato integrado a la cadena de valor, a los modelos de negocio y cuanta herramienta de gestión utilice la compañía.

La pervivencia del modelo económico, político y social de los países, así como la del planeta, penden de un hilo dada la contundente evidencia respecto de la crisis climática y social que enfrentamos. Atreverse a cambios de gestión profundos en favor de “hacer lo correcto” desde lo social, medioambiental y gobierno corporativo, es infinitamente más relevante que tener el “mejor Reporte de Sustentabilidad del mercado”. La única “duda” que debería preocupar a las empresas no puede ser otra que la búsqueda de la mejor manera -sincera y sin condicionantes- de sumarse a este esfuerzo por la sustentabilidad de nuestra forma de vida.

-La autora es experta en compliance, prevención de delitos y anticorrupción.




Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.