Primarias y legislativas colombianas allanan camino de Petro de cara a las presidenciales

El candidato Gustavo Petro mostrando las papeletas en su local de votación en Bogotá. Foto: Reuters

La coalición Pacto Histórico, impulsada por Gustavo Petro y Francia Márquez, se posicionó como la mayor bancada del Senado tras las legislativas del domingo.


Lo que decían las encuestas lo siguen diciendo los conteos de voto: Gustavo Petro, el candidato presidencial por el Pacto Histórico en Colombia, es el postulante más seguro para llegar a la Casa de Nariño en el periodo 2022-2026. En las primarias de este domingo, el fundador del movimiento Colombia Humana demostró ser fuerte dentro y fuera de su coalición, obteniendo el 80% de las preferencias en su alianza y siendo, por lejos, el más votado del domingo.

A ello se suma que la coalición Pacto Histórico también sorprendió en el Congreso, ya que contará con 17 senadores y 25 representantes en la Cámara Baja. A este buen momento de la izquierda colombiana se le suman las encuestas, que le dan a Petro un nuevo récord de 42% de los votos para mayo.

El profesor de Ciencia Política en la Escuela Superior de Guerra de Colombia, Vicente Torrijos, comentó los resultados de las primarias del domingo. “Lo que creo es que Petro queda en una posición sumamente fortalecida: está en un bloque político sumamente sólido, monolítico, no tiene fisuras, pero tiene que ampliar el radio de acción para hacer realidad el objetivo estratégico de ganar la presidencia en primera vuelta. Y para eso, la alternativa más lógica por afinidad ideológica y razones coyunturales sería conseguir la adhesión del Partido Liberal”, opina Torrijos.

Gustavo Petro en el acto de celebración de su elección como candidato del Pacto Histórico en Bogotá. Foto: Reuters

Este domingo tuvieron lugar las elecciones legislativas en Colombia, en las que se renovaba la totalidad de las cámaras del Congreso: 108 senadores y 188 diputados. Junto con eso, y en miras a las elecciones presidenciales del 29 de mayo, los colombianos votaron por los candidatos a las primarias presidenciales. En la ocasión, hubo tres coaliciones que presentaron sus postulantes a la papeleta: Pacto Histórico por la izquierda, Equipo por Colombia por la derecha y la Coalición Centro Esperanza.

Al interior de Pacto Histórico, Petro arrasó con un 80% de los votos (cuatro millones 487 mil), seguido de Francia Márquez con un 14% (783 mil preferencias), y otros tres candidatos que no superaron el 5% cada uno. Más allá de las amplias ventajas, los expertos compararon las votaciones entre esta carrera y la del Centro Esperanza, la coalición menos votada de la noche, ya que la segunda candidata de Pacto Histórico superó en cantidad de votos al ganador del centro.

El candidato Sergio Fajardo triunfó en la primaria centrista, tan solo con el 33% de las preferencias (723 mil votos), pasando por encima de Juan Manuel Galán (22%), Carlos Amaya (20%) y Alejandro Gaviria (15%).

Una historia distinta fue la del Equipo por Colombia, donde el fundador del movimiento Creemos Colombia, Federico Gutiérrez, se llevo el 54% de los votos (dos millones 160 mil). Con esta cifra, el exalcalde de Medellín declaró ser “el único que puede ganarle a Petro”, exhortando a Sergio Fajardo para que se sume a su candidatura. En esa misma línea, el candidato Óscar Iván Zuluaga, “el candidato del uribismo”, decidió renunciar a la carrera para así apoyar a Gutiérrez, en miras a buscar la unidad dentro de la derecha.

“La derecha está muy dispersa. A diferencia del bloque monolítico que es el Pacto Histórico, en la derecha hay muchos matices que dificultan la idea de unidad. La primaria de ayer, precisamente, dota al ganador, Federico Gutiérrez, de una serie de ventajas para consolidarse como la figura que amalgame o aglutine las diferentes tendencias de la derecha: el Partido Conservador está de su lado, y ahora también el uribismo”, apunta Torrijos.

El candidato Federico Gutiérrez, de la coalición Equipo por Colombia, sonríe durante su nominación como el candidato de la derecha en Bogotá. Foto: AFP

En la ocasión votaron 38 millones de colombianos y se contó con la particularidad de que entraron a la Cámara Baja 16 nuevos congresistas, pertenecientes a los escaños especiales para las víctimas del conflicto armado. Esta decisión se había tomado en los acuerdos de paz que se consiguieron con las Farc en 2016, y además aseguran cinco senadores y cinco diputados al Partido Comunes, formación política del grupo ya desmovilizado.

En las legislativas, el Pacto Histórico consiguió 16 “curules” o escaños en el Senado, igualando al tradicional Partido Conservador y superando por uno al Partido Liberal. También en la Cámara de Representantes la coalición de Petro se destacó, obteniendo 25 escaños y siendo la segunda fuerza política, solo bajo los liberales, que consiguieron 32. El candidato presidencial declaró, al conocer los resultados de las legislativas, que “se logró el mejor resultado del progresismo en la historia de Colombia”.

Con esto, ya muchos dejaron de preguntarse si será Petro el ganador de las elecciones, y pasaron a especular sobre la necesidad de una segunda vuelta: el mismo candidato lo sugirió este domingo al celebrar su proclamación como candidato, diciendo que el Pacto Histórico estaba “ad portas de ganar en la primera vuelta presidencial”.

Gente sentada en un local de votación cerca de las urnas en Bogotá. Foto: Reuters

“Por primera vez en Colombia, el tema Farc sobre si negociar o no con ellos, con una guerrilla u otra, no es el factor determinante de la agenda. Sí, la seguridad, el terrorismo y las relaciones internacionales tóxicas son centrales en la agenda, pero yo creo que esta confianza que los colombianos están manifestando hacia su sistema democrático, sumamente fortalecido, va de la mano con la búsqueda de eficiencia y satisfacción del ciudadano: resolución de temas concretos”, comenta Torrijos, señalando que tanto el perfil de Petro como el de Gutiérrez -alcaldes de grandes ciudades- los muestra como líderes capaces de mejorar la calidad de vida.

“La seguridad es un problema, pero el empleo es otro, y todos los resultantes del trauma pandémico, las condiciones de igualdad para recuperarse, pero también para superar los enormes déficits. Los candidatos están medidos en esos términos”, apunta el cientista político.

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