Un verdadero deja vú. Eso es lo que está pasando con la evolución de la pandemia. Si bien el proceso de vacunación acelerado que lleva adelante el país hizo que se comenzara a ver la salida de la crisis, el fuerte aumento que han tenido los casos de contagios empinándose, llevó al gobierno a decretar nuevamente una cuarentena casi total de la Región Metropolitana.

De hecho, de los 42 municipios a nivel nacional que pasaron a cuarentena, 21 de ellos se ubican en la Región Metropolitana.

Dichas medidas comenzarán a regir desde el próximo jueves 25 a las 5.00 horas. A partir de ese día, un total de 13,7 millones de personas estarán bajo confinamiento total, de los cuales 6,2 millones serán de la capital.

De acuerdo a Valentina Cortés, economista de Clapes UC, desde el jueves el 77% de la población de la RM estará en cuarentena y el restante porcentaje en transición. Mientras que a nivel país, un 69% de la población estará en cuarentena, es decir, 7 de cada 10 personas se encontrará en cuarentena total, y un 26,5% de la población en transición.

Cortés puntualiza que “en términos de producción, esto se traduce en que un 64,3% del PIB estará en cuarentena a partir del jueves 25 de marzo y un 31,9% del PIB en transición”.

La economista precisa que comparativamente, desde que tenemos registros del plan Paso a Paso (fines de julio pasado) estos porcentajes son los más altos que hemos tenido.

Antes de este anuncio se esperaba que marzo fuera el mes en que la economía comenzara su camino ascendente de recuperación, sin embargo, si bien todavía los economistas no esperan que el Imacec sea negativo, sí prevén que sea menos positivo de lo anticipado previamente.

La economista complementa su análisis señalando que “durante la pandemia hemos visto una alta correlación entre la actividad económica y la movilidad del país, lo que nos hace esperar que el aumento en las restricciones a la movilidad tenga un impacto significativo sobre la actividad”. En ese sentido, sostiene que si bien en las tres primeras semanas de marzo es evidente la disminución en la movilidad, el resultado de la actividad dependerá de cómo evolucione la movilidad ante estas nuevas medidas. “Estamos proyectando un crecimiento entre 0,5% y 1,5% para marzo, pero depende de cómo afecten las cuarentenas a la movilidad y cómo se hayan adaptado las actividades a funcionar con estas nuevas condiciones”.

No obstante, Clapes espera que el primer trimestre sea negativo, ya que enero se contrajo 2,8% y la expectativa para febrero apunta a una caída de 1,5%. “Esperábamos que la actividad en el primer trimestre se contraiga entre 0,4% y 1,2%. Con el anuncio de nuevas restricciones a la movilidad podríamos ver que esta caída se profundice”.

Patricio Rojas, economista de Rojas y Asociados, puntualiza que marzo ya venía afectado con las medidas restrictivas anteriores y que ahora se profundiza. Pese a ello, sostiene que la base de comparación “ayuda”, puesto que en marzo del año pasado la actividad se contrajo 3,5%. Por ese factor, es que Rojas todavía espera una cifra azul, que será del orden de 1,1%.

Pavel Castillo, gerente comercial de Corpa, comenta que antes de estas nuevas medidas esperaban un alza de 2,5%, en cambio ahora estamos viendo que la segunda ola marzo les hizo ajustar su previsión en 1,1%, por lo que el crecimiento del tercer mes se situará en 1,4%.

Sergio Lehmann, economista jefe de Bci afirma que “es difícil de cuantificar, pero tendrá un impacto de algunas décimas, por lo que le restará algunas décimas a su proyección de 1,5% que tenía para este mes”. Esa misma opinión entregó Alejandro Fernández, gerente de Estudios de Gemines, quien asevera que “son marginales”.

Felipe Alarcón, economista de EuroAmerica, comenta que para el Imacec de marzo “ya estábamos estimando una menor velocidad mes contra mes, la cual lógicamente podría disminuir algo más, de esta forma creemos que el crecimiento de marzo crecería en torno a 4,5%, inferior a lo que teníamos previamente de algo en torno a 5%. La base de comparación es favorable”.

¿Y en abril?

Es probable que la cuarentena se extienda al menos a las primeras semanas de abril. Eso es lo que los expertos tienen incorporado en sus modelos de análisis.

Sobre este punto, Alarcón sostiene que “pese al endurecimiento de las condiciones para la actividad, es muy probable que el crecimiento de la actividad se sitúe en torno a 15%, dado que la base de comparación es muy favorable, ya que coincide cuando la actividad cayó en picada producto de las medidas de confinamiento tomadas a principios de la pandemia”. De hecho, en abril del año pasado, la caída fue de 13,8%.

Esa misma visión es la que entrega el economista de LyD, Tomás Flores, quien dice que en abril del año pasado el Imacec cayó tanto por paralización del comercio exterior como por cuarentenas en Chile. “Esta baja base de comparación y un comercio exterior reactivado, hace muy probable que el crecimiento de abril sea positivo a pesar de las cuarentenas masivas”. Por todo ello, prevé una expansión de 8,9%, inferior al 10% estimado previamente.

En tanto, Cortés sostiene que “todavía es muy pronto para sacar proyecciones para abril, pero es claro que de continuar con cuarentenas totales para un porcentaje importante de la población tendremos un impacto negativo en la actividad económica, lo que se traduce en un retraso en el proceso de recuperación, particularmente complicado para las actividades del sector de servicios, que requieren de alta interacción social”.

Para el año, en tanto, las previsiones se mantienen entre 5,8% y 7%, confiados en el proceso de recuperación a partir de mediados del segundo trimestre.