El lanzamiento tuvo lugar dos horas después de que Norcorea advirtiera de que tomaría acciones militares “más feroces” si Estados Unidos se apega a “su campaña para fortalecer la disuasión extendida a sus aliados regionales”.
17 nov 2022 02:58 AM
El lanzamiento tuvo lugar dos horas después de que Norcorea advirtiera de que tomaría acciones militares “más feroces” si Estados Unidos se apega a “su campaña para fortalecer la disuasión extendida a sus aliados regionales”.
En las últimas semanas Corea del Norte ha lanzado docenas de misiles, incluido un misil balístico intercontinental hace 10 días que provocó alertas de evacuación en el norte de Japón.
El acuerdo con los surcoreanos representa un marcado contrapunto a las acusaciones que hizo Estados Unidos hace días de que Corea del Norte estaba enviando secretamente artillería a Rusia. Pyongyang refutó las imputaciones, las cuales fueron vertidas por John Kirby, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional.
Durante la jornada, el Ejército surcoreano ha señalado además que el misil disparado la semana pasada por Pyongyang que sobrevoló la frontera marítima era un ‘SA-5′, similar a uno empleado por Rusia en el marco de la guerra en Ucrania,
También reiteró sus “profundas condolencias” a las víctimas provenientes de países extranjeros así como a sus familias.
En entrevista con La Tercera, la directora del sitio 38 North sostiene que los recientes lanzamientos de misiles por parte de Pyongyang parecen ser “una nueva respuesta táctica”. Y calificó la respuesta de Seúl como innecesaria, ya que “solo está escalando la situación”.
El anuncio tiene lugar en un momento en que las tensiones entre Pyogyang y Seúl están al alza tras el lanzamiento por parte de Corea del Norte de decenas de misiles en el último mes.
El libro de jugadas de Pyongyang tradicionalmente ha sido aumentar continuamente las provocaciones hasta que llama la atención de Estados Unidos, y luego puede negociar el alivio de las sanciones u otras concesiones desde lo que considera una posición de poder. Pero el listón en estos días puede ser más alto. Ya hay una discusión creciente en Seúl sobre la creación de un programa nuclear autóctono.
La policía surcoreana investiga los fallos de seguridad que provocaron la mortal desbandada en Seúl en la noche del 29 de octubre, para la fiesta de Halloween, en la que fallecieron al menos 156 personas. Varios días después, Lidia Rodríguez, una estudiante mexicana, aún trata de asimilar lo sucedido en el barrio de Itaewon, donde había quedado con unas amigas. Cuenta a RFI que Corea del Sur sigue sumida en un pésame que se alarga a la espera de tener noticias esclarecedoras sobre lo ocurrido.
Según se ha informado, llegaron 11 llamadas de emergencia que alertaban sobre el hacinamiento cuatro horas antes de la aglomeración mortal, pero los agentes no hicieron nada.
Corea del Sur acusó “invasión territorial” luego de que un misil norcoreano sobrevolara la frontera, acción que fue respondida por el primer país. Las pruebas llevadas a cabo por Pyongyang ocurren en el marco de ejercicios militares entre Seúl y Washington.
Las redadas se han producido tan solo un día después de que la Agencia Nacional de Policía admitiera que llegaron 11 llamadas de emergencia que alertaban sobre el hacinamiento en el barrio Itaewon, todo ello cuatro horas antes de la aglomeración mortal.
Según las Fuerzas Armadas surcoreanas, los tres misiles han sido lanzados a una distancia similar a la que han recorrido los misiles disparados por su vecino del norte.
El misil lanzado desde Pyongyang activó el sistema de alerta por ataque aéreo en toda la isla surcoreana, motivo por el que se ha procedido a la evacuación de miles de residentes hacia sótanos.
Las autoridades habían pronosticado que hasta 100.000 personas se unirían a las festividades, las primeras sin grandes restricciones por el Covid-19 desde que la pandemia comenzó en 2020. La estampida provocó la muerte a 153 personas.