El experto en Medio Oriente dice a La Tercera que "se ha vuelto de alguna manera a la situación de 2001", cuando los insurgentes gobernaban el país.
16 ago 2021 05:22 PM
El experto en Medio Oriente dice a La Tercera que "se ha vuelto de alguna manera a la situación de 2001", cuando los insurgentes gobernaban el país.
Entre este grupo se encuentran el ahora expresidente afgano Ashraf Ghani, el enviado estadounidense Zalmay Khalilzad, el líder supremo de los talibanes Haibatullah Akhundzada y Abdul Ghani Baradar, principal negociador de los insurgentes en Doha.
Sahraa Karimi es la realizadora más importante del país asiático y escribió en Twitter una carta ante el retorno de los talibanes al poder. Fue apoyada por directores de distintos lugares.
“Si debo morir lo haré haciendo mi trabajo, por lo que más lucho, por llegar a ser una reportera de terreno”, comenta Khadina Amain ante la amenaza que significa el avance de los talibanes.
El grupo fundamentalista islámico había avanzado rápidamente a lo largo del país durante la última semana, ayudados por la retirada de las tropas estadounidenses. Tras la huida del Presidente y la desaparición de las fuerzas de seguridad afganas el domingo, los combatientes lograron tomar el control de la capital y apuestan por una "transferencia pacífica del poder".
Desde comienzos de mayo, cuando se concretó el inicio de la retirada de las tropas de Estados Unidos hasta hoy los talibanes lideraron una acelerada captura de todo el territorio del país, que cayó en sus manos en poco más de tres meses.
Tras la caída de varias grandes ciudades en manos de los talibanes, la capital afgana quedó bajo asedio como la última defensa de las fuerzas del gobierno, que en otras partes se han desmoronado ante el implacable avance insurgente. Los combatientes rebeldes están acampados a solo 50 kilómetros de distancia, dejando a Estados Unidos y otros países corriendo para evacuar a sus connacionales en Kabul ante el temor de un asalto sin cuartel. Helicópteros iban y venían entre el aeropuerto capitalino y la zona de la embajada estadounidense en la resguardada Zona Verde, lo que recordó la evacuación norteamericana de Saigón 46 años atrás, que marcó el fin de la Guerra de Vietnam.
Los insurgentes completaron la toma de Kandahar, la segunda ciudad más grande del país y lugar de nacimiento del movimiento islamista, y detuvieron a un caudillo que organizó las fallidas defensas de la urbe occidental de Herat. Las adquisiciones les otorgan el control total del sur y el oeste de Afganistán. Decenas de miles huyen.
“Kandahar está completamente conquistada”, dijo un portavoz talibán en una cuenta de Twitter oficial. Un residente confirmó la captura a las agencias internacionales, señalando que las fuerzas del gobierno se retiraron masivamente a una instalación militar en las afueras de la ciudad. Anteriormente los terroristas habían capturado este jueves la ciudad de Herat, continuando su ofensiva ante la que Estados Unidos anunció el despliegue de 3.000 soldados para evacuar a su personal diplomático.
El Ejército de EE.UU. ahora evalúa que los rebeldes podrían aislar Kabul en 30 días y posiblemente tomar el control en 90, según informan The Washington Post y Reuters. Pese a las proyecciones, el Presidente Joe Biden dijo que no lamentaba su decisión de retirar las tropas del país.
El portavoz de los talibanes, Zabihulá Muyahid, aseguró en Twitter que el grupo se ha hecho ya con el control de las oficinas del gobernador de la región de Fará -fronteriza con Irán-, en una operación que aspira a completar con la expulsión del “enemigo” de otras zonas de la ciudad. Asimismo, Muyahid informó de la toma en la tarde de este martes de la capital de la provincia de Baghlan, Pul-e-Jumri, al norte de Kabul, donde los extremistas controlan ya la oficina del gobernador, el cuartel de la policía, el centro de inteligencia y “todos los espacios gubernamentales”.
Para el mandatario estadounidense, quien durante mucho tiempo defendió el fin de la guerra más larga de la historia de Estados Unidos, hay un cálculo frío: no se pudo realizar nada más y su país logró hace mucho tiempo su objetivo de derrotar a Al-Qaeda en la región después de los ataques del 11 de septiembre de 2001, aunque los talibanes aún no han cortado sus lazos con el grupo.
Ante el retiro de tropas internacionales del territorio, el grupo insurgente aceleró la ofensiva militar centrando sus ataques en las grandes ciudades. Estados Unidos intensificó sus ataques aéreos en las últimas horas en defensa de sus aliados afganos.
El grupo insurgente ha ido avanzando por el país tomando el control de provincias, a medida que se ha concretado la salida de las tropas de EE.UU. y de la OTAN.
La alerta del gobierno británico se emitió luego de que los talibanes lanzaron una gran ofensiva en coincidencia con el retiro de las fuerzas internacionales encabezadas por Estados Unidos, tras casi dos décadas de conflicto. Este viernes, los militantes islámicos capturaron la ciudad suroccidental de Zaranj, la primera capital provincial en su poder desde que intensificaron su ofensiva en mayo.