SEÑOR DIRECTOR:

Se ha retirado Marco Antonio Ávila del Ministerio de Educación. Es una de las carteras más débiles que ha tenido el gobierno, a pesar de que el FA viene de los movimientos estudiantiles. En efecto, el programa para abordar las problemáticas educacionales es muy débil y debe ser trabajado por el ministro entrante. Por ejemplo, los altos niveles de deserción escolar y los aprendizajes que se perdieron durante la pandemia han sido una de nuestras mayores preocupaciones, sin embargo, son dos puntos que se combatieron con estrategias demasiado superficiales para lo importante que son.

Además, la violencia dentro de los establecimientos educacionales, sumado a los paros de profesores y estudiantes, poco ayudan a retomar el curso normal de las clases, enfrentar la deserción o lograr que los jóvenes y niños asistan a clases, y existen escasas políticas públicas que enfrenten estos hechos, en especial ante la negativa de algunos municipios de usar la Ley Aula Segura. Y esto es solo la punta del iceberg de los problemas que debe enfrentar el nuevo ministro.

Siempre hablamos de lo importante que es la educación, y de cómo mejorando la educación podemos dar solución a gran parte de los problemas del país. Y con este cambio de gabinete pareciera que tenemos una nueva oportunidad para centrarnos en recuperar y mejorar la calidad en la educación, sin embargo, ¿es Nicolás Cataldo el indicado para tan importante labor?

Gabriel Mora Peña

Fundación para el Progreso

Comenta

Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.