Presupuesto 2024

SEÑOR DIRECTOR:

“Es responsable, gestiona la economía y refuerza el crecimiento”. Con esta frase, el Presidente definió el presupuesto 2024. Sin embargo, si uno sigue escuchando el discurso y miramos los datos que hoy nos está entregando la economía chilena, el sector externo y las perspectivas futuras, entonces podemos disentir del Mandatario.

Si consideramos que el próximo año, con suerte, creceremos al 2%, un aumento de 3,5% del gasto público nos pondrá en una situación bastante compleja, porque alguien tiene que pagar la cuenta finalmente. Por otro lado, se echó de menos precisamente el tema de gestión, de cómo gastar mejor y que realmente ese gasto apoye al crecimiento en las variables que son relevantes, no solo en el corto plazo, sino que también con una mirada de más largo plazo.

Además, se insiste en el pacto fiscal para gastar más, donde sabemos que el primer efecto en la economía es contractivo y también le sigue poniendo incertidumbre a las reglas para los inversionistas, que es precisamente lo que debemos incentivar si queremos crecer más y generar más empleos de largo plazo y que las cifras nos acaban de indicar que los necesitamos pronto.

Al parecer, el gobierno trabajó sobre supuestos muy optimistas y quizás ese es el pecado de esta administración, generar altas expectativas en la población, pero cuando se quieren hacer las cosas, chocan con la realidad y buscan la fórmula para llegar al objetivo, aunque esto pueda tener efectos negativos en el mediano o largo plazo.

Así, mientras más alto uno se suba al pedestal, la caída es más estrepitosa y dolorosa.

Carlos Smith

Docente investigador CIES-UDD