Seguridad municipal

SEÑOR DIRECTOR:

En medio de la grave situación de seguridad que estamos viviendo, donde el temor ha llegado a su máximo histórico, alcanzando a 9 de cada 10 chilenos, las personas exigen medidas urgentes que parecen no llegar.

En ese contexto, los alcaldes de las comunas de La Reina y La Florida decretaron “estado de emergencia comunal”, lo que implica un incremento en las medidas y los recursos destinados al combate de la delincuencia en sus territorios. Entre las medidas están la contratación de exuniformados para reforzar los equipos de seguridad municipal; selección y capacitación de civiles como “observadores preventivos vecinales” para vigilar las calles, y la instalación de cámaras de control, entre otras.

Si bien se han levantado críticas desde distintos sectores, lo cierto es que las personas se sienten desprotegidas frente a la delincuencia y son las autoridades locales, con mínimas facultades para apoyar en esta tarea, las que han actuado con determinación para responder las demandas de sus vecinos, lo que, en principio, siempre será un aporte dentro de este lamentable escenario.

Sin embargo, es evidente que este tipo de acciones no dejan más que en evidencia lo precario de nuestro actual sistema interinstitucional de prevención y acción contra el delito. Es impostergable realizar un esfuerzo mayor si realmente queremos avanzar con resultados reales y de largo plazo. Para esto, lo principal es lograr una coordinación entre las instituciones que tienen atribuciones en la materia, lideradas por el Ministerio del Interior y Seguridad Pública, responsable constitucional de la seguridad interior del país. Adicionalmente, es un buen momento para avanzar en el rol de los gobiernos locales respecto a apoyar, con decisión, todas las acciones que, dentro de la ley vigente, apunten a entregar paz a la población.

Pía Greene Meersohn

Centro de Estudios en Seguridad Pública y Crimen Organizado, CESCRO, Universidad San Sebastián