El “telefonazo” de la diputada Orsini a generala de Carabineros por control de identidad a Jorge Valdivia

La parlamentaria RD se comunicó el 26 de enero con la directora de Derechos Humanos, Karina Soza, para ponerla en contacto con el exfutbolista por un presunto acto ilegal y arbitrario en su contra en un procedimiento policial, donde se habrían vulnerado sus derechos. La también integrante de la comisión de Seguridad Ciudadana de la Cámara se autodenunció en la Fiscalía para demostrar que nunca cometió un acto de corrupción.


Fue el 25 de enero que la diputada de Revolución Democrática (RD), Maite Orsini, aterrizó en La Habana, Cuba, para participar en el congreso “Nuevo orden Económica Internacional”. Al otro día, la parlamentaria tenía que hacer su presentación, por lo que estaba preprándose para eso, cuando a las 6.00 de la mañana recibe un llamado desde Chile.

Jorge Valdivia se comunicó con Orsini para plantearle una situación que lo tenía angustadiado: la noche anterior -le dijo- personal de la 37 comisaría de Carabineros, lo controló cuando trotaba en un parque en Vitacura. Le pidieron el carnet de identidad, pero no lo tenía, lo ánimos se crisparon, y los policías lo llevaron a la comisaria, esposado.

Esto último indignó al futbolista, relatan fuentes policiales, por lo que se generó una discusión en el trayecto. Para Carabineros todo se ajustaba a protocolo, pues era un control de identidad, y si no lograba identificarse con su cédula, tenían que llevarlo la comisaría para confirmar sus datos.

Al llegar al recinto policial, algunos policías reconocieron al histórico “10″ de la Selección Chilena. “Es el mago Valdivia”, repetían, aunque el deportista, en ese entonces, no estaba para fotos, ni autógrafos.

En la comisaría lograron establecer su identidad -aunque desde su círculo cercano dicen que nunca le tomaron las huellas digitales, ni nada- y lo liberaron. Todo esto Valdivia se lo relató por teléfono a la diputada Orsini, quien le transmitió que lo que le había ocurrido no se ajustaba a derecho, se habían vulnerado sus derechos y que se trataba de actos de apremios ilegítimos.

Quienes han conversado del tema con Orsini, explican que la diputada no quería que el tema escalara, pues el futbolista quería querellarse contra la institución y, por lo mismo, decidió tomar su celular y llamar directamente a la jefa de la Dirección de Derechos Humanos, la generala Karina Soza.

En la conversación, Orsini le expuso que la había llamado el “ídolo nacional” -según sus propias palabras- para exponerle el caso, que estaba molesto, y que quería interponer acciones legales, pero que prefería que Valdivia la llamara directamente a ella y pudieran conversar.

Orsini y Soza se conocían, pues han trabajado y coordinado distintos temas de género y seguridad, por lo que entre ambas existía una relación directa.

Investigación interna y autodenuncia

¿Por qué una diputada gestiona el contacto entre un particular y una general de Carabineros? Desde el equipo de Orsini descartan cualquier irregularidad, pues, aseguran, ella siempre intercede por quienes la buscan para interponer denuncias o reclamos. Ejemplifican con el caso de Camila Villavicencio, profesora, víctima de violencia de género y discriminación, en un procedimiento policial, donde la diputada reunió a su familia con el general director de Carabineros, Ricardo Yáñez.

Dado que se trataba de una denuncia hecha por una diputada, Carabineros abrió una investigación interna para determinar si hubo o no vulneración de derechos hacia Valdivia, en el procedimiento policial que enfrentó.

En el entorno de la diputada Orsini, explican que el control de identidad preventivo, a juicio de la parlamentaria, no consigna el traslado a una unidad policial para constatar quién es el fiscalizado, sino que eso solo aplica en el artículo 85 del Código Procesal Penal, es decir, cuando se tienen indicios que el controlado participa de la comisión de un delito.

Por su parte, la parlamentaria prepara una serie de acciones legales en contra de la exesposa de Valdivia, la modelo Daniela Aránguiz, por el delito de injurias. La exparticipante de Mekano acusó a la diputada de “borrar papeles” y interceder ante la Fiscalía por el deportista.

En base a eso, y para que se demuestre que eso no es así, Orsini presentó una autodenuncia en la Fiscalía para que se indague -y en definitiva que se descarte- si eso ocurrió o no y si podría tratarse de un caso de corrupción.

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