A poco más de un año del hackeo a Banco de Chile

El 24 de mayo se cumplió un año desde el ciberataque que sufrió Banco de Chile, donde le sustrajeron US$ 10 millones, convirtiéndose en el primer hackeo con robo de dinero que se conoce en el país. Dos meses después, el 24 de julio de 2018, se conoció la filtración de la primera base de datos de tarjetas de crédito, que abarcó 14 mil plásticos.

Tras estos eventos, los incidentes de ciberseguridad comenzaron a ser más notorios. Fue así como se inició una seguidilla de filtraciones de datos de tarjetas, donde solo en algunos casos se determinó la fuente de la filtración, como ocurrió con Correos de Chile, empresa que confesó que algunos de los datos que se filtraron salieron de uno de sus proveedores.

Más tarde, el 6 de noviembre de 2018, Banco Consorcio sufrió un ciberataque donde le robaron casi US$ 2 millones. El dinero sustraído habría llegado a Hong Kong, al igual como ocurrió en el caso de Banco de Chile.

Este año no ha sido la excepción: el 11 de junio se dio a conocer que le robaron información de 41.593 tarjetas de crédito y débito a Redbanc, pero ese no es como las demás filtraciones: la firma está investigando a uno de sus proveedores por el robo de esta información.