60% de los argentinos cree que el país necesita un "cambio de rumbo" en varias áreas

A dos semanas de haberse celebrado las primarias legislativas en las que el gobierno de Cristina Fernández registró una importante baja de su votación en las urnas y donde los candidatos K perdieron en las principales provincias del país, el diario Clarín dio a conocer ayer un sondeo realizado por la consultora Opinión Pública, que muestra una consolidación del voto opositor en todo el país de cara a las elecciones parlamentarias del próximo 27 de octubre.

La encuesta, que se realizó a 1.100 personas en 65 localidades representativas, establece que más de la mitad de los consultados cree que tras los resultados de las primarias se vive un clima de fin de ciclo y más de un 60% opina que el país requiere un "cambio de rumbo" o un "cambio profundo" en varias áreas. Similar porcentaje indica que el Congreso tendrá un "mayor equilibrio" luego de los comicios de octubre y siete de cada diez entrevistados piden que la Presidenta convoque al resto de las fuerzas políticas para hacer un gran acuerdo nacional.

A estas cifras se suman los resultados de una encuesta realizada por la consultora Aresco la semana pasada, en la que el candidato a diputado por la provincia de Buenos Aires -el mayor distrito electoral del país- y una de las figuras centrales de la oposición, Sergio Massa, amplía en dos puntos porcentuales la ventaja que obtuvo en las primarias sobre el representante oficialista, Martín Insaurralde, al obtener un 37,5% de las preferencias, contra un 29,1% del kirchnerista. Esta distancia crece al proyectar a los indecisos, ya que el alcalde de Tigre logra un 40,2% y su principal contendor un 31,2%. Así, en la provincia de Buenos Aires un 32,4% piensa votar por "el candidato que apoye Cristina Kirchner" y un 62,5% lo hará "por otro candidato".

Para el analista político de la consultora Opinión Pública, Enrique Zuleta, tras los resultados de las primeras encuestas poselectorales "cabe pronosticar que los realineamientos en marcha tenderán a profundizarse". El pronóstico del especialista es que siete de cada 10 argentinos no votarán por el oficialismo en octubre. Similar impresión tiene Mariel Fornoni, directora de la firma Management & Fit, para quien la tendencia de las primarias no se va a modificar. "Si hay reordenamientos, se darán dentro de la misma oposición, pero la gente no saltará de un candidato opositor a uno oficialista", señala la experta electoral a Clarín. En tanto, Federico Aurelio, de la consultora Aresco, indicó que el voto opositor ganará nuevamente. "Aunque el kirchnerismo crezca cuatro o cinco puntos, va a ser minoritario", afirmó.

El grueso de los analistas coincide en que si el gobierno pretende revertir esta tendencia deberá tomar medidas de impacto para mejorar los resultados de la elección. Este aspecto es clave, según Fabián Perechodnick, de Poliarquía, quien estima que en las elecciones legislativas ocurrirá lo mismo que en las presidenciales de 2011, donde el ganador de las primarias -en esa oportunidad fue la actual presidenta- tiene más posibilidades de ampliar la brecha.

Si bien en las primarias del 11 de agosto los candidatos del gobierno obtuvieron un 26,3% de votación nacional a nivel de diputados, el oficialista Frente para la Victoria sigue siendo la principal fuerza política del país, ya que la oposición está muy dividida. En ella se encuentran movimientos de izquierda, de derecha y del mismo peronismo.