Alemania envía armas a los kurdos de Irak para frenar avance del Estado Islámico

Berlín rompe así con una tradición y suministra armas por primera vez a una facción beligerante, interviniendo directamente en un conflicto armado.




Alemania enviará misiles antitanque y ametralladoras a los kurdos en el norte de Irak que combaten a los fundamentalistas de Estado Islámico (EI), resolvió hoy el gobierno de la canciller alemana, Angela Merkel, en una reunión en Berlín.

En concreto, Berlín suministrará a las tropas de la región kurda autónoma 30 lanza-misiles antitanque del tipo Milan y 500 proyectiles así como 8.000 ametralladoras de los tipos G3 y G36, por valor de 70 millones de euros. 

Además, el gobierno de Merkel se comprometió a destinar otros 50 millones de euros en ayuda humanitaria, pero descartó de plano el destacamento de tropas alemanas en la región.

Según informó la ministra alemana de Defensa, Ursula von der Leyen, el objetivo es equipar con material bélico a una tropa de 4.000 soldados hasta finales de septiembre. Le seguirá otra carga para otros 4.000 combatientes.

"La situación en Irak es sumamente crítica", alegó la política democristiana. "Es nuestra responsabilidad humanitaria y nuestro interés en política de seguridad ayudar a los que sufren y frenar al EI", señaló en un comunicado.

Berlín aspira a que el adiestramiento de los soldados kurdos en el manejo de las armas tenga lugar en Alemania. "De no ser practicable, podría tener lugar en las inmediaciones de Erbil o en un tercer Estado", reza la resolución que acordaron Merkel y los ministros de Defensa, Exterior, Economía, Finanzas y Cooperación Internacional, además del presidente de la bávara Unión Social Cristiana.

Berlín rompe así con una tradición y suministra armas por primera vez a una facción beligerante, interviniendo directamente en un conflicto armado. 

La decisión ha generado polémica en un país que abrazó el pacifismo como consecuencia de dos guerras devastadoras. Dos tercios de la población rechazan en las encuestas el envío de armamento.

El gobierno alemán tiene competencia exclusiva en este campo, pero Merkel explicará mañana sus razones ante la Cámara Baja en una sesión extraordinaria en la que se celebrará una votación simbólica. Se espera que una clara mayoría de diputados oficialistas respalde la moción, mientras que la oposición ha anunciado su rechazo.

El gobierno alemán justifica este viraje alegando la necesidad de impedir más matanzas como las de los yazidíes y cristianos a manos de los fundamentalistas islámicos. "Se puede hablar de un genocidio", dijo Merkel.

Esta no es la primera vez que se envían armas alemanas a una región en conflicto. Alemania provee desde hace décadas a Israel de armamento y equipamiento militar, independientemente de la situación en el Cercano Oriente. Pero se trata de una excepción.

El derecho de existencia de Israel es política de Estado en Alemania desde el genocidio de los judíos de Europa a manos de los nazis. Además de contar con expresa autorización, el suministro de armas germanas a Israel es fomentado con cientos de millones de euros de los contribuyentes alemanes.

En el caso de Irak, Alemania respalda por primera vez a una facción en conflicto que no es un aliado tradicional. El gobierno autónomo kurdo de Irak persigue fines que son rechazados e incluso considerados peligrosos por Berlín. El presidente de la región kurda iraquí, Massud Barsani, quiere la independencia de Irak.

La oposición acusa al gobierno de llevar a cabo un cambio de paradigmas en la política exterior y de seguridad, pero el Ejecutivo insiste en que se trata de una situación excepcional.

"Es una de las decisiones más difíciles que he tomado en la vida", confesó hoy el ministro de Economía y presidente del SPD, Sigmar Gabriel. 

Los kurdos iraquíes reciben ayuda militar de varios países en su lucha contra los terroristas islámicos. Estados Unidos e Irán los proveen de armas desde hace tiempo. Francia, el Reino Unido e Italia también suministrarán armas.

Otro temor en Alemania es el destino final que puedan tener las armas. El gobierno ha admitido que no puede dar garantías, pero asegura que tratará de evitar que se creen arsenales. Por esta razón fueron destacados a Erbil la semana pasada seis de soldados del Ejército encargados de la distribución del armamento.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.