Alianza refuerza ofensiva y pide citar a la Cámara al superintendente de Bancos

Una sesión especial de la Cámara de Diputados pedirán las bancadas de la UDI y RN cuando se retome el trabajo en el Congreso, el 31 de marzo, tras la semana distrital.

La solicitud tendrá como objetivo citar al superintendente de Bancos e Instituciones Financieras, Eric Parrado, para que explique los detalles de la operación mediante la cual el Banco de Chile otorgó créditos a las empresas Caval y Silca, lo que permitió la compraventa de tres terrenos en Machalí, en la Región de O'Higgins.

Esto, luego que Qué Pasa  publicara detalles de un contrato complementario entre Mauricio Valero (socio de la nuera de la Presidenta Michelle Bachelet, Natalia Compagnon, en Caval) y el empresario Hugo Silva (dueño de Silca), firmado al momento de cerrar el negocio. Ese documento daba facultad exclusiva a otra firma de propiedad de Valero para vender posteriormente los terrenos a un tercero, asegurando una repartición de las ganancias (ver detalles en página 2).

Tras conocer los antecedentes, en la oposición decidieron reforzar su ofensiva fiscalizadora. "Me gustaría que hiciéramos pronto una sesión especial para citar al superintendente y que nos explique cómo se dio esta 'bicicleta' entre el Banco de Chile, Caval y la empresa compradora", afirmó el diputado UDI por Rancagua, Issa Kort. A su juicio, Parrado también debería explicar "qué tipo de créditos se están efectuando, si se está cumpliendo la ley de la libre competencia o si se está prestando para algún tipo de colusión o burbuja inmobiliaria".

En la misma línea está el diputado RN Nicolás Monckeberg, quien junto a su par José Manuel Edwards presentó la semana pasada una querella por eventuales delitos de negociación incompatible y violación de secreto. "Esto confirma que Caval tenía interés directo en el cambio de uso de suelo. Sólo quedan dos opciones: o Caval prometió a los compradores que el plan regulador cambiaría, lo que no fue real, por lo que estaríamos frente a una estafa; o Caval hizo gestiones para cambiar el plan regulador, lo que confirmaría el tráfico de influencias", dijo Monckeberg. Edwards añadió que "esto refuerza la tesis de que es muy probable que haya habido un delito", y emplazó directamente a Bachelet: "Le quiero pedir a la Presidenta que exija a su hijo que entregue toda la información. Sería muy difícil creer que se está enterando por la prensa de esto".

OTRAS ACCIONES

En la oposición tienen claro que cuentan con un margen de acción reducido para fiscalizar los nuevos antecedentes. ¿La razón? Este nuevo contrato es un acuerdo entre privados, y las herramientas de los parlamentarios sólo les permite la fiscalización de funcionarios públicos. Es por esto que uno de los caminos a seguir es a través de la Superintendencia de Bancos. Así, junto con solicitar la sesión especial, este lunes algunos diputados envíarán oficios al organismo para recopilar más antecedentes.

Ayer, además, el secretario general interino de la UDI, Pablo Terrazas, consultó a los abogados que asesoran al partido para analizar la posibilidad de ampliar la denuncia que presentó ante el 8vo Juzgado de Garantía. Esto se suma a la comisión investigadora de la Cámara que anunciaron la UDI y RN hace dos semanas, y que esperan concretar al regreso de la semana distrital. Según comentan algunos diputados, esto podría ser sólo un primer indicio de un modus operandi tras el cual podría haber una red de personeros políticos involucrados.

Desde el oficialismo, el diputado Juan Luis Castro (PS)  dijo que "hay un secretismo muy grande que el fiscal tendráque aclarar. El negocio parece más turbio de lo que todos pensábamos. No me cabe duda que el Banco de Chile sabía que le estaba prestando plata al comprador y al vendedor. Me llamó la atención que en el verano la Superintendencia dijera que la operación estaba bien hecha".

Según quienes conocen detalles de la operación, los ejecutivos del Banco de Chile que tramitaron los créditos a Caval y Silva sabían de la existencia de este segundo contrato.