De la cancha de barrio a Milán: el camino en que Medel supo entrenar al "Pitbull"

Desde sus inicios mostró despliegue, fuerza y coraje. Pero debió trabajar bastante y pasar varios conflictos para aprender a controlar su "lado oscuro".




"Si no hubiera sido futbolista hoy sería un narcotraficante". La frase de Gary Medel en 2011 demuestra no sólo la sinceridad del jugador, sino que el lugar desde donde partió una carrera que ya lo tiene en el Inter de Milán. Llega al fútbol italiano, además, como uno de los mejores de la elogiada actuación de Chile en el Mundial y como ejemplo de sacrificio tras jugar desgarrado ante Brasil. Algo muy distinto a sus inicios, donde su falta de control en la cancha y sus polémicas fuera de ella ponían en riesgo su desarrollo.

"Me parece un paso lógico, sobretodo después lo que hizo en el Mundial. Ha tenido una carrera ascendente, desde un inicio, siempre con esa hambre", comenta Rodrigo Astudillo, técnico que lo conoció en las inferiores de la UC.

LOS INICIOS
Medel comenzó en Conchalí, en el club Sabino Aguad, siguiendo la tradición familiar. A los 12 años llegó a Universidad Católica, donde Mario Lepe fue clave para promoverlo hasta el primer equipo en 2006. Y en su primer clásico universitario, en el que jugó como lateral, dio un claro ejemplo de su estilo, cuando se fue expulsado tras una falta sobre Marcelo Salas.

Un año después, en otro duelo con la "U", tuvo un problema con un compañero de equipo. Medel marcó los dos goles de la UC en el triunfo por 2-1, pero discutió con Eros Pérez, tras el gol de la azules. El volante culpó al defensa de la marca y Pérez le pegó un cabezazo.

Ya se notaba claramente

el bien ganado apodo de "Pitbull". 

Pero esta agresividad iba acompañada de calidad y esfuerzo. Así formó parte de la Sub 20 que logró el tercer lugar en el Mundial de 2007, en Canadá. Aunque en la semifinales con Argentina apareció el lado malo, con una expulsión a los 15' por falta sobre Gabriel Mercado.

CONFLICTOS FUERA DE LA CANCHA
Los problemas también aparecieron afuera de la cancha. En mayo de 2007, tres días antes de definir el título con Colo Colo, protagoniza una riña en una discoteque de Santiago, lo que puso en duda su presencia en la nómina para el Mundial Sub 20

El 26 de octubre de 2007, Carabineros lo sorprendió manejando a exceso de velocidad y en estado de ebriedad. En junio de 2008 fue acusado de violencia intrafamiliar por parte de su pareja. El 3 de enero de 2009, se salió del camino en la carretera cuando regresaba a Santiago, sin licencia de conducir.

Y el 3 de febrero 2009, a las 2.30 de la madrugada, una fiesta en el departamento Medel en Huechuraba tuvo un brusco final. El aún volante de la UC se dio cuenta que faltaba una de las asistentes. Tras buscarla los presentes se dieron cuenta de que Catalina Reyes (18 años) había caído por el balcón, desde el noveno piso: murió en forma instantánea.

Los cruzados se preocuparon especialmente de cuidar a Medel y sacarlo de su ambiente. Aún así, le costaba controlar sus impulsos.

SALTO INTERNACIONAL
Pero en el juego, su despliegue llamó la atención de Boca Juniors, donde cumplió con lo esperado. Y nuevamente protagonizó un clásico en su estilo. El 25 de marzo de 2010, los xeneizes vencieron 2-0 a River Plate, con anotaciones de Medel, quien después vio la roja por una pelea con Marcelo Gallado.

En 2011 parte a Europa, al Sevilla, donde debe explicar su apodo: "Es que soy bravo dentro de la cancha". Medel se ganó el cariño de los hinchas, pero también varias rojas. "Muchas incidencias, un arbitraje impropio y el enésimo numerito de Medel dejaron a un lado mil y una cuestiones tácticas", se publicó del chileno tras una derrota ante el Betis.

Pero pese a estos problemas, Medel seguía siendo clave en los equipos en que jugaba y en la selección. Aunque en las Eliminatorias para Brasil 2014, fue expulsado en el primer tiempo de la derrota por 3-1 de Chile ante Colombia, en el Monumental.

EL GRAN CAMBIO
El año pasado, en una decisión que llamó la atención, aceptó partir al Cardiff, un equipo menor de la Liga inglesa, que terminó descendiendo. Pero ahí ya se notó un cambio radical. Medel mantuvo sus cualidades, pero cada vez eran menos las noticias por expulsiones o conflictos. En un equipo de mal desempeño, el chileno era una de las grandes figuras.

Astudillo comenta sobre el mejor comportamiento en la cancha que "hace rato que venía mejorando eso. Tiene que ver un poco con la madurez que ha adquirido, la confianza que le han dado. Mantiene su esencia, es un tipo aguerrido, con hambre, que no da ninguna pelota por perdida. Transmite a los demás esa misma fuerza".

Y así ha sido en la "Roja", ya con Jorge Sampaoli. En la selección también se comprobó el cambio de actitud, sin dejar de lado el juego intenso. Un proceso reconocido por sus propios compañeros, como el capitán Claudio Bravo.

Así llegó al Mundial, donde mostró, además de actitud, buen juego y sacrificio, una notable disciplina que le permitió mantenerse siempre en la cancha.

Sólo él se sacó, cuando en el alargue ante Brasil, entre lágrimas, asumió que no podía más. Ese es el Gary Medel que contrata el Inter. Un "Pitbull" en su mejor versión.

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