Detenidos por atentado en casino de Monterrey: "Sólo queríamos darles un susto" a los dueños

Los cinco imputados aseguran que no tenían en sus planes matar a nadie en el casino Royale, donde murieron 52 personas.




Los cinco detenidos por el atentado en el casino Royale de Monterrey, en México, en el que murieron 52 personas declararon que con su accionar buscaban asustar a los dueños del recinto ya que éstos se negaron a pagar una extorsión.

"Solo queríamos darles un susto", manifestaron esta mañana al ser presentados a la prensa con casacas rojas con la leyenda "detenido". Según el gobernador de Nuevo León, Rodrigo Medina, la situación dijeron los sospechosos, se les salió de control y que no planeaban matar a nadie.

Incluso los cinco imputados, quienes dijeron pertenecer al grupo criminal de Los Zetas, argumentaron que sus jefes los recriminaron por las dimensiones que tomó el ataque, en el que clientes y trabajadores murieron calcinados y asfixiados, según cita la Cadena CNN México.

El fiscal de Nuevo León, Adrián Emilio de la Garza, recordó que las autoridades tienen varios videos de los delincuentes cargando el combustible que usaron en una estación de gasolina y arribando al establecimiento en varios vehículos para cometer el atentado.

Además, precisó que todos ellos confesaron su participación en los hechos -e incluso en otros crímenes como secuestros y homicidios-, y que algunos fueron identificados por huellas dactilares halladas en los autos.

De la Garza reveló que en los hechos participaron al menos 12 personas y que en las imágenes de las cámaras de seguridad del casino, situado en un lugar muy concurrido, se pueden ver "otros cómplices" que las autoridades no habían detectado en los primeros análisis de los registros.

Por su parte, el subprocurador regional de control de la Procuraduría General de la República (PGR, fiscalía federal), José Cuitláhuac Salinas, que encabeza las investigaciones por parte del gobierno federal, explicó que las autoridades han pedido ayuda a Interpol para ubicar a Raúl Rocha Cantú, el propietario del casino.

Los investigadores tienen la certeza de que un piloto, que ya declaró ante las autoridades, sacó del país en un vuelo privado a Rocha Cantú, a quien las autoridades buscan para que ofrezca su declaración.

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