El gran colisionador de hadrones se alista para volver tras 2 años de pausa

El LHC se volvió popular en 2013 al descubrir el bosón de Higgs, también conocido como partícula de Dios.




A principios de los 60 se teorizó sobre la existencia de una partícula, el llamado bosón de Higgs, que sería la pieza clave para entender cómo se formó la materia que existe en el Universo.

Esta partícula, planteada por Peter Higgs junto a François Englert y Robert Brout, fue intensamente buscada durante casi medio siglo, hasta que en 2013, la Organización Europea para la Investigación Nuclear (CERN), anunció el hallazgo con un 99% de fiabilidad de esta partícula, un evento catalogado como "histórico", pues hasta ese momento era considerado como uno de los grandes enigmas de la física. Ese fue el primer descubrimiento del LHC.

Para confirmar la existencia del bosón de Higgs, científicos de todo el mundo crearon el Large Hadron Collider (LHC) o Gran Colisionador de Hadrones.

El LHC es un acelerador y colisionador de partículas ubicado en la CERN, que se encuentra cerca de Ginebra. Dentro del colisionador, dos haces de protones son acelerados en sentidos opuestos hasta alcanzar el 99,99% de la velocidad de la luz, y se les hace chocar entre sí produciendo altísimas energías que permiten simular algunos eventos ocurridos inmediatamente después del big bang.

El Gran Colisionador de Hadrones comenzará a funcionar durante marzo luego de estar dos años detenido. Esta pausa que tuvo el proyecto fue programada para aumentar la energía del acelerador hasta casi el doble (de 7 TeV a 13 TeV).

"Si todo esto sale bien, habremos cumplido el cometido de los gestores de la máquina subiendo la energía y podremos empezar a producir física" dijo Rolf Heuer, director general del CERN a El Mundo. "¿Qué puede salir de ahí? no lo sé", confiesa Heuer.

"Antes el objetivo estaba muy claro: encontrar el bosón de Higgs o demostrar que no existía. Ahora está menos claro lo que se puede descubrir en el futuro. Pero siempre que hemos aumentado la energía lo suficiente hemos encontrado una sorpresa", opina Álvaro de Rújula, físico teórico del CERN en conversación con El Mundo. "Aunque no es obvio que duplicar la energía sea esta vez suficiente para encontrar algo nuevo, saber que no lo es también sería una novedad importante", asegura el investigador.

QUÉ DESCUBRIMIENTOS PODRÍA TRAER EL LHC

Rolf Heuer, también afirmó que los descubrimientos que se puedan hacer serán a largo plazo. "Ni en 2016 y probablemente tampoco 2017. Sino más tarde". Pero aunque es incierto lo que se encontrará en la próxima ronda de coaliciones, Heuer cree que se avanzará en el conocimiento de la masa oscura, y eso es mucho si se piensa que esta forma el 25% de universo y la materia que conocernos que forma la tierra o las estrellas, es solo el 5%.

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