Elie Tahari apuesta por las texturas lujosas en NYFW

El estilo estadounidense en su estado más puro se paseó hoy en la Semana de la Moda de Nueva York (NYFW) de la mano de Elie Tahari, quien se decantó por siluetas muy femeninas y de negro, aunque aligeradas con sedas.

Tahari, un reconocido diseñador israelí que crea tendencias en Nueva York desde hace décadas, señaló que su pasarela de hoy "es un homenaje a la mujer viajera del siglo XX" y que para crearla se inspiró en la glamourosa Marlene Dietrich en la película "Shanghai Express" (1932).

El diseñador, muy esperado en esta pasarela porque aporta un sentido práctico y de precios más asequibles a sus propuestas, optó por las texturas lujosas, incluyendo pieles, cuero y ante mezclados con sedas y lanas, que suman calidez y sofisticación.

MODA FEMENINA
Su desfile, algo caótico entre el público, las cámaras y los fotógrafos, que fue presentado como una rueda permanente de modelos y con el público de pie, se centró en el negro, utilizado por las neoyorquinas casi como uniforme.

Para los tejidos de sus propuestas diurnas Elie Tahari eligió tweed, alpaca, cachemira y lanas en sus más variadas versiones, en ocasiones reversible para los abrigos, así como el cuero, al que le dio un aire casi militar, combinados en ocasiones con minifaldas tableadas.

Entre los colores, Tahari se decantó por los tonos marrones, camel, verdes profundos, cobres y azules prusia, además del negro, combinados con mostazas y naranjas, entre otros, para blusas de seda.

COLECCION MASCULINA
Para su colección masculina, el diseñador explicó que se inspiró en las mismas calles de Nueva York y en la arquitectura de la ciudad, en concreto de edificios como el Seagram, obra del arquitecto Mie Van der Rohe, o el Lever House, de Gordon Bushaft, de formas simplificadas y realizados en cristal y acero.

Así Tahari ofreció una visión urbana, moderna y elegante de hombres vestidos en lanas oscuras, negro y azul marino, a veces grises con sutiles rayas para dar un aire más deportivo, y con mezclas de lanas para los blazers, que se llevan con suéteres de cachemira.

Los abrigos masculinos de Tahari son hasta la rodilla y resaltando la silueta, para combinar con pantalones rectos y con chaquetas de dos botones, que proporcionan esbeltez.

Tahari, que a menudo ha confesado que le gusta trasladar su pasión por la arquitectura al diseño de la ropa, está presente con sus tiendas en 40 países y para este año abrirá 15 nuevos locales, entre ellas en México y en España.