Gobierno ofrece US$ 350 millones extra para presupuesto de Educación 2012

La oficina del senador DC Andrés Zaldívar, en calle San Martín, se transformó ayer en el escenario para el segundo encuentro entre el gobierno y representantes de la oposición, con miras a suscribir un acuerdo en torno al presupuesto de Educación.

Por dos horas se extendió la reunión, que se había mantenido en reserva hasta última hora. La condición había sido puesta por el Ejecutivo, con el fin de generar un espacio tranquilo para oficializar la respuesta gubernamental frente al pliego de ocho puntos que había acordado la Concertación, el PC y otras fuerzas de izquierda.

En el encuentro estaban presentes casi los mismos negociadores que se habían visto las caras en la primera cita del miércoles en el Congreso. En representación del gobierno estaban los ministros de Educación, Felipe Bulnes, y de la Segpres, Cristián Larroulet, y el subsecretario del Mineduc, Fernando Rojas. Mientras que por la oposición estaban Zaldívar, los senadores José Antonio Gómez (PRSD) y Juan Pablo Letelier (PS) y los diputados Guillermo Teillier (PC), Pepe Auth (PPD) y Carlos Montes (PS).

Según algunos asistentes, Bulnes y Larroulet llegaron con una actitud cautelosa y no dieron cifras en un principio. Sin embargo, al ser interpelados por los parlamentarios señalaron que la contrapropuesta gubernamental implicaba inyectar US$ 350 millones adicionales al presupuesto de Educación.

El monto -que representa un tercio de lo que exige la oposición- fue calificado como insuficiente por los negociadores, quienes reiteraron su meta de mil millones de dólares extras.

Aun así, el detalle del ofrecimiento del Ejecutivo contenía avances en varias temáticas pedidas por las fuerzas opositoras.

Larroulet y Bulnes se comprometieron a garantizar becas, con cobertura total, al primer y segundo quintil de la estudiantes de enseñanza superior, e iniciar un proceso gradual para ampliar el beneficio a otros sectores. En el primer año planteaban, por ejemplo, dar la mitad de la beca al tercer quintil.

Los ministros, además, ofrecieron incrementar los aportes basales a universidades, incluyendo nuevas glosas presupuestarias para las casas de estudio estatales y regionales.

También, en una de las pocas medidas extrapresupuestarias, que requeriría una nueva ley, el gobierno se comprometió a aumentar los fondos de subvención escolar en 1,6%, para llegar al 8%.

No obstante, los representantes del Ejecutivo también rayaron el límite de lo que no estaban dispuestos a transar. Así, hicieron ver que no aceptarán diferencias de beneficios estudiantiles entre universidades públicas y privadas ni tampoco entre establecimientos escolares. En esa línea, defendieron el financiamiento compartido en colegios particulares subvencionados.

En vista de esas discrepancias ideológicas, Larroulet y Bulnes se abrieron con la oposición a tratar de buscar un acuerdo acotado al presupuesto y aplazar el debate de fondo del sistema educacional.

En la últimas semanas, las directivas opositoras habían acordado una estrategia que apuntaba, precisamente, en esa línea. Según análisis de la oposición, "los tiempos" ya no daban para una negociación profunda y, desde un punto de vista electoral, puede ser útil mantener vigente el debate educacional hasta la próxima campaña presidencial.

A juicio de los parlamentarios asistentes a la cita fue buena y un avance, pese a que los montos seguían siendo bajos. Fuentes de la Concertación comentaron que esas mismas conclusiones iban a ser transmitidas a los jefes de partido y a los dirigentes estudiantiles.