Hallan mineral y lo bautizan "chongite" en honor a científico chileno

Hace más de una década que el doctor Anthony Kampf -investigador del Museo de Historia Natural de Los Ángeles, California- ha estado estudiando los minerales en depósitos del desierto de Atacama. Esto con ayuda de Maurizio Dini y Arturo Molina, geólogos de la Universidad de La Serena, que todos estos años le han enviado muestras de los minerales.

En 2014, Kampf viajó junto a su colega Joe Marty a Iquique y visitó el depósito de arsénico Terracillas, donde descubrieron un nuevo mineral, el que bautizaron "chongite" en honor al científico chileno Guillermo Chong, Premio Nacional de Geología.

"Existen alrededor de 4 mil minerales en el mundo y de vez en cuando se descubre uno nuevo y se le bautiza con un nombre. Hace cuatro años me mandaron un mail y me preguntaron si aceptaba que le pusieran mi nombre. Yo les dije que sí. El mineral tuvo que pasar por una decena de análisis, exámenes y debieron presentarlo a una comisión, hasta que terminó siendo aprobado", cuenta Chong, académico de la Universidad Católica del Norte.

Según explica Kampf a La Tercera, el chongite se presenta en cristales delgados incoloros y se formó cuando los otros minerales en el depósito, incluido el arsénico, interactuaron durante miles de años con agua rica en sal de las lluvias infrecuentes. A pesar de ser un descubrimiento que "no cambia el mundo", sí es una nueva especie mineral que entrega una comprensión del mundo natural. "Ayuda a explicar las condiciones en que se forman los minerales. En algunos casos, pueden ayudarnos a descifrar los procesos geológicos", dice Kampf.

Chong cuenta que encontrar un mineral es un trabajo muy difícil. "Es como si descubrieras una nueva especie de ave en el Amazonas, algo con características únicas. Cada mineral es como una persona. No tiene una traducción económica directa, pero aporta a la construcción del mundo".

Si bien el chongite fue descubierto en un depósito de arsénico, Kampf asegura que esto no traería ninguna consecuencia negativa para la población minera, ya que el tipo de arsénico que contiene es el arsenato, el cual no es peligroso para la salud. Además, Terracillas se ubica lejos del área poblada y está cerca de la costa, por lo que, ante cualquier flujo de lluvias sobre la tierra, terminará con el arsénico diluido en el océano.