Huracán María azota Puerto Rico y deja al 100% de su territorio sin luz

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Gobernador puertorriqueño solicitó a Donald Trump declarar la isla como zona de emergencia. Huracán es el más potente que azota la isla en 80 años. La alcaldesa de San Juan dijo que "nuestra vida cambió".




En menos de dos semanas, Puerto Rico recibió el impacto de dos huracanes: Irma el miércoles 6 de septiembre y María este miércoles, con vientos de hasta 250 kilómetros por hora. En vista de la destrucción causada por esta última tormenta, el gobernador de Puerto Rico, Ricardo Roselló, pidió al Presidente Donald Trump declarar a la isla como zona de emergencia.

Roselló dijo en una entrevista con GFR Media, que hasta anoche no se habían reportado víctimas fatales luego del paso de María, el huracán más potente que azota Puerto Rico en más 80 años y que alcanzó categoría 4 en su paso por la isla. Sin embargo, confirmó que los daños en la infraestructura son "severos" y se suman a los estragos que generó Irma.

Horas más tarde, la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders, dijo que Trump "está monitoreando de cerca la situación". Según la Agencia Estatal para el Manejo de Emergencias y Administración de Desastres (Aemead), María dejó el 100% de la isla, donde viven 3,3 millones de personas, sin suministro eléctrico ni telecomunicaciones. Varios ríos se desbordaron y el 80% de las residencias en el sector Juana Matos en Cataño, cerca de San Juan, quedaron totalmente arrasadas. Varios hospitales de la capital y la ciudad colindante de Caguas sufrieron serios daños en sus estructuras, por lo que los pacientes tuvieron que ser evacuados.

Se estima que los daños provocados por el huracán Irma rondan los US$ 1.000 millones, aunque el cálculo de los daños de María podría alcanzar una cifra mucho más alta, según informó el diario local El Nuevo Día.

El gobernador Roselló también dijo a través de Twitter que "mantener el orden resulta fundamental para que autoridades puedan ejecutar apropiadamente. Por tanto, ordeno toque de queda efectivo hoy 6 pm". La medida rige desde este miércoles hasta el sábado y busca resguardar el orden público, reduciendo el riesgo de disturbios.

La radio WIPR indicó que las autoridades están preocupadas por el río La Plata, aunque también se registraron crecidas en Río Grande de Loiza, Espíritu Santo y Fajardo. Además de inundaciones, las lluvias podrían provocar en las próximas horas deslizamientos de tierra considerados "mortales", alertaron meteorólogos estadounidenses.

Roselló agregó que "la cola del huracán va a traer a Puerto Rico más lluvia y más viento". Por eso, los rescatistas no pueden salir a cumplir sus funciones hasta que los vientos bajen.

Devastación "absoluta"

La alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz, dio cuenta de la devastación "prácticamente absoluta" que dejó el huracán María. "Nuestra vida como la conocíamos cambió", dijo.

"Hay mucho dolor, mucha devastación", dijo Cruz entre lágrimas a un grupo de periodistas en un refugio en la capital, cuyo techo se movía por los fuertes vientos de 220 kilómetros por hora que azotaron la isla, forzando a los refugiados a congregarse en los pasillos. "Muchas partes de San Juan están completamente inundadas (...). Hay que reconstruir la ciudad capital".

El martes, el gobernador Roselló reconoció, en una conferencia de prensa, que Puerto Rico tiene una infraestructura eléctrica "mucho más vulnerable y debilitada" en comparación con la que debió resistir el paso de los huracanes Hugo y Georges, en 1989 y 1998, respectivamente.

Además, anticipó que 1,5 millones de clientes de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) podrían permanecer sin luz "un buen tiempo" y que "todo va a depender de la magnitud del daño" según consignó el diario Primera Hora.

Los daños a la red eléctrica se extenderían también, según el periódico, a una cantidad indeterminada de los 1,3 millones de abonados de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA), quienes se quedarían sin agua potable.

Por la tarde el huracán dejó atrás la isla, con vientos de 220 kilómetros por hora. Los vientos del huracán se extienden hasta 95 kilómetros de su centro.

Se espera que María continúe ese rumbo con un decrecimiento paulatino de la velocidad hasta la mañana del viernes.

El centro del huracán pasaría este jueves sobre aguas cercanas a la costa nororiental de República Dominicana y después se desplazará cerca de las Islas Turcos y Caicos y el sureste de Bahamas mañana. Luego se desplazaría hacia el noreste.

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