La gestión de la felicidad

La vida familiar dejó de ser un tema oculto en la vida cotidiana de las empresas. Esto gesta vínculos de mayor calidad entre los colaboradores, lo que repercute en la felicidad de las personas.




¿Vieron "En busca de la felicidad"? Muchos recordamos la película del actor Will Smith, que narra la historia real de Chris Gardner. Desempleado, sin casa y abandonado por su esposa, el leitmotiv de Gardner era darle una mejor vida a su hijo. Luego de un camino marcado por la lucha, la perseverancia y el esfuerzo, Gardner termina convirtiéndose en un emprendedor multimillonario y filántropo que termina luchando por las personas sin hogar de Estados Unidos.

La emblemática búsqueda de Gardner por la felicidad, retrata un tema central en la vida de las personas ¿Quién no quiere ser feliz? ¿Quién no se ha preguntado alguna vez qué significa ser feliz? El deseo de ser felices es el gran llamado interior de todo ser humano, es un anhelo fundamental, que, a diferencia de lo que ocurría hace algunas décadas, hoy se aborda desde una mirada social, no sólo personal, al punto que incluso se le considera un elemento constitutivo a la hora de evaluar el desarrollo de los países.

UN CAMBIO DE PARADIGMA

Actualmente estamos viviendo un cambio de época que ha permitido espacios para que los grandes paradigmas se cuestionen y den paso a nuevas miradas. No cabe duda de que la preeminencia del racionalismo y los grandes modelos sociales y políticos que rigieron el siglo XX, ya no responden a las nuevas necesidades del mundo de hoy y están dando paso a la

revalorización de las personas por sobre los sistemas

.

Hoy, todos tienen opinión y se manifiestan a través de los más diversos canales. Así, afloran con mucha fuerza los grandes temas de la vida personal: el amor, la felicidad, el dolor, la ilusión, entre otros. De hecho, en la Universidad de Harvard hoy una de las cátedras más exitosas es la del profesor Tal Ben Shachar sobre felicidad.

Diversos estudios han demostrado que el

crecimiento económico no es suficiente para lograr la felicidad

. Parece obvio, sin embargo, la evidencia corrobora que mirar al ser humano de manera integral, impacta en el desarrollo y en cómo los países salen de la pobreza. Por ejemplo, a una persona de nivel socioeconómico bajo no le basta tener acceso a educación y a los bienes básicos para salir de su condición, sino también influyen aspectos más íntimos, como pueden ser sus motivaciones, la calidad de los vínculos, su sentido de pertenencia social, entre otros. Todos estos elementos tienen directa relación con la felicidad de las personas.

¿QUE ES LA FELICIDAD?

La felicidad es un concepto complejo y difícil de definir, ligado a nuestra concepción de la vida y del ser humano, a los tiempos que vivimos y sus influencias sociales. Hoy pareciera que estamos aproximándonos a una nueva mirada de la felicidad, que no la reduce a la satisfacción de necesidades materiales, sino que incluye también otra dimensión fundamental de la existencia:

la emocional

.

No es raro que en las diversas estadísticas aparezca una relación directa entre felicidad y vínculos humanos, entre los cuales se destacan los familiares, los de amistad y de trabajo. La razón es que es aquí donde se da de mejor modo el encuentro personal; el ámbito donde podemos volcar nuestro ser a los otros de manera radical. Por ello, una sociedad que promueve la felicidad debe favorecer el desarrollo de un ser humano con vínculos de calidad.

Para que se den estos vínculos es necesario que las

empresas promuevan políticas de conciliación entre familia y trabajo

, es decir, flexibilidad en el tiempo para poder gestar estos vínculos de calidad, sin por ello restar la responsabilidad frente al trabajo. Al mismo tiempo, se debe integrar la mirada de que familia y trabajo se complementan y enriquecen mutuamente, lo que permite que los desafíos familiares puedan estar presentes en la vida cotidiana de las empresas, gestando a la vez vínculos de mayor calidad entre los colaboradores, lo que también incide en la felicidad de las personas.

CONDICIONES PARA LA FELICIDAD EN LA EMPRESA

Promover instancias que permitan ver el trabajo personal como un aporte social.

Generar espacios físicos; lugares de encuentro que permitan acrecentar los vínculos entre los colaboradores.

Destacar las actitudes positivas (elemento constitutivo de la felicidad) dentro de la cultura de la empresa.

Gestar círculos de conversación donde los temas incluidos no sólo sean laborales sino  personales y familiares.

Incluir sistemas de evaluación de desempeño con una mirada integral.

PARA TENER EN CUENTA

Para BancoEstado Micro Empresas (BEME) es un desafío gestionar las palancas que le permitan a todos y todas las personas que trabajan en la empresa tener las mejores condiciones para hacer su trabajo.

Detrás de estos conceptos está que cada colaborador sienta que el trabajo contribuye a que sean personas más felices de manera integral y, por consiguiente, más comprometidas. Para ello, desde el 2006 existe una Subgerencia de Gestión de Felicidad,

Esta nueva política emprendida por la filial estatal se sustenta en cuatro ejes:

conciliación, participación, acompañamiento y sentido

. En la medida que se construyan cada uno de estos pilares, en Beme creen que sus colaboradores podrán estar más contentos y satisfechos con su trabajo.

Por una parte el eje

Conciliación

busca generar instancias para que la vida familiar y laboral no esté en conflicto. Algunas de las medidas tomadas hace un par de años son: flexibilidad horaria para padres y madres al reintegrarse al trabajo luego del nacimiento de un hijo y también la posibilidad de pedir permiso sin goce de sueldo por algún tema familiar.

El

eje de participación

tiene relación con la inclusión de la gente a la hora de generar la mejor empresa. El foco es escuchar activamente a los mismos compañeros y desde ellos generar prácticas necesarias. A este proceso le llaman

co-construcción

.

El

Acompañamiento

tiene que ver precisamente con todas las actividades que buscan acompañar a los colaboradores y sobre todo a las jefaturas. Aquí la idea es generar condiciones para que los jefes acompañen a sus colaboradores en el desarrollo profesional.

El último eje busca que cada trabajador encuentre

sentido

en lo que hace y eso se transmita en su relación con los clientes.

Al parecer las políticas y prácticas han dado resultado. Hoy la tasa de rotación es menor al 5 %, siendo que en la industria financiera el índice es cercano al 17 %. Además la filial se ha mantenido dentro de los primeros lugares de "Great Place to Work" y "Mejores empresas para padres y madres que trabajan" durante los últimos años.

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