La seguridad asusta en Brasil a poco más de un mes del Mundial

Quedan 45 días para que comience el Mundial de Brasil y el ambiente que rodea los días previos a la cita planetaria no es el más acogedor. La inseguridad social preocupa en el país anfitrión, que ha visto como en el último año han surgido distintos focos de violencia debido a la organización de la Copa.

Precisamente, durante la Copa Confederaciones del año pasado estalló un conflicto social en el país, en el que miles de personas salieron a las calles a protestar debido a la poca inversión en salud y educación, en comparación al alto volumen del gasto público para el Mundial, el cual es rechazado por el 55% de los brasileños.

De hecho, el presupuesto para el torneo llegó a 13.000 millones de dólares (un 10% más que lo estipulado), siendo el mayor en la historia en este tipo de eventos. Además, los gastos en las obras de construcción o reforma de los estadios pasaron de US$1.040 millones a 3.510.

Es por esto que las marchas y manifestaciones sociales no han hecho otra cosa que multiplicarse en Brasil. El último hecho ocurrió esta semana, cuando un bailarín murió presuntamente a manos de la policía.

Incluso, el presidente de la FIFA, Joseph Blatter, prefirió desmarcarse respecto al tema: "La seguridad es asunto del Estado. La FIFA no puede garantizar la seguridad, es una cuestión que debe solucionar el Gobierno organizador, en este caso el de Brasil", dijo Blatter.

En otros países el tema no ha pasado inadvertido. Por ejemplo, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Alemania calificó a Brasil como país de "alto riesgo" y entregó diversas recomendaciones a sus habitantes para evitar sufrir algún tipo de asalto durante el Mundial. En tanto, en Río de Janeiro, ya están instalados 2.700 militares, que estarán patrullando las favelas hasta que termine la Copa.

Asimismo, diversas autoridades han asegurado que todo saldrá bien durante el Mundial, pero eso solo el tiempo lo dirá. Quedan 45 días para saber la verdad.