Mega liberal

A un año de que el grupo Bethia tomara el control del canal, los nuevos dueños impulsan una línea editorial más liberal, con temáticas antes vetadas, para recuperar sintonía.




Antes de que el grupo Bethia comprara Mega, la programación de Semana Santa del canal era motivo de numerosas reuniones, donde en varias ocasiones participaba Ricardo Claro, dueño anterior de la señal. Este año, en cambio, el tema se resolvió rápido, la programación especial sólo se mantendrá por hoy, y el resto del fin de semana será más bien normal, incluso con Morandé con Compañía contemplado para exhibirse mañana.

Uno de los cambios más profundos que estableció la nueva propiedad, cuando tomó posesión en marzo pasado, fue buscar impulsar una línea editorial que han definido como "más liberal", y que se traduce en varios temas que antes estaban vetados, ahora tienen cabida en su pantalla. El intento ya se ha dejado ver en varios de sus estrenos, recientes y por venir. A saber: el late show Más vale tarde y el programa Desfachatados; Ojo con clase, un programa donde cuatro expertos homosexuales asesoran en distintas áreas a un heterosexual y que debuta este miércoles; la serie Modern family, que tiene entre sus personajes a una pareja gay que adopta a una niña, y el reality que preparan y que barajan realizar en Isla de Pascua. La búsqueda de cambio no sólo ha sido en pantalla, también en la imagen del canal: desde el año pasado trabajan con una nueva agencia de publicidad, Leche.

Todo en un escenario donde la señal está en cuarto lugar de sintonía, con 6,1 puntos de rating promedio en lo que va del año, lejos de las 7,5 unidades de Chilevisión, que ocupa el tercer lugar y que precisamente fue el líder de la industria en 2011 con una parrilla abierta y liberal. La apertura, además, fue un camino que también siguió Canal 13, luego de su venta a Andrónico Luksic y que también lo ayudó a subir al número uno de sintonía.

"Nuestra línea editorial busca representar adecuadamente a los chilenos del siglo XXI. Estimamos que son personas más liberales, con más sentido de sus derechos. Y queremos representarlos a través de propuestas programáticas concretas", resume Mario Conca, presidente ejecutivo de Mega, detallando en qué se traduce esa intención: "No estamos por el destape. No es que tengamos algo en contra, pero queremos estar con las preocupaciones del momento de la gente y eso ya está en el pasado. Además, está muy asociado como una herramienta de rating fácil y no queremos usarlas. Nuestro giro es liberal, no de libertinaje, es encontrar espacios de libertad y responsabilidad que sintonicen con la sociedad moderna".

Al interior de la señal la intención de cambiar ha sido notoria. Así, como enumeran distintos miembros, temas como el aborto, la anticoncepción, la legalización de la marihuana y la homosexualidad estaban totalmente al margen de lo que se permitía abordar. Y ahora no.

Un ejemplo: cuando realizaron la adaptación de la teleserie argentina Los Roldán, que acá se llamó Fortunato, el personaje transexual que interpretaba allá Florencia de la V y que acá encarnó Luciano Cruz-Coke fue una complicación. Aquí el rol varió a una especia de Tootsie y se eliminó completamente el subtexto sexual que contenía. Ahora, en cambio, la pareja homosexual de Modern family no sólo no fue obstáculo, sino que se convirtió en un aliciente, sobre todo el tomarlo como una situación normal dentro de la historia. "La idea es abrir los debates y que no solamente sea una creencia ancestral la que todos sigamos por antonomasia", explica Ignacio Eyzaguirre, gerente de producción de Mega. Mientras que una fuente del canal recuerda que en la época del grupo Claro, el tema de la homosexualidad sólo se podía tocar en humor, al estilo de Morandé... Este último programa es uno de los únicos espacios del "viejo Mega" que mantiene buenos ínidces de audiencia y al que no se le han pedido modificaciones, a pesar de que sus contenidos incluyen comentarios machistas y homofóbicos.

Las pautas de los espacios también reflejan la búsqueda de cambio. Así, esta semana el programa de las tardes A viva voz tuvo una nota centrada en juguetes sexuales, mientras que Mucho gusto abordó la legalización de la marihuana. "No tener restricciones temáticas te permite usar las herramientas con las que compiten todos, te hace más competitivo", opina Jorge Banderas, productor ejecutivo del bloque matinal.

Eyzaguirre explica que este es un proceso que se intentará seguir profundizando. "Está llegando un mensaje de que algo está pasando en Mega. Pero vienen cambios que son más importantes, como el que se está preparando en prensa y que va a ser una etapa bien definitoria en el asentamiento de esta nueva personalidad de este canal", apunta el ejecutivo, añadiendo que "todo el año va a ser de instalación y poscionamiento". Conca, por su parte, detalla que uno de los ejes de esa nueva propuesta serán la calidad informativa y una pauta centrada en las noticias. El hito siguiente, en tanto, será el regreso de la televisora a la ficción, con "formatos bien jugados en el sentido de instalar conversación", como define Eyzaguirre.

Un punto pendiente para la televisora es ampliar su audiencia, sobre todo al segmento ABC1. "La idea es tratar de invitar a una audiencia más amplia al canal, que ha tenido predominancia en sectores más populares. Hacerlo más transversal, y eso se logra con dos cosas: lo editorial, con propuestas que inviten a una audiencia un poco más grande, y también con la calidad, como en las puestas en escena que estamos haciendo, que distan bastante de lo de antes", resume el gerente de producción.

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