Pareja de Rafael Garay: "Dijo que no valía la pena seguir con el proceso (contra el cáncer)"

Marya Sara. Ese sería el nombre de la ciudadana rumana con que Rafael Garay Pita conversaba a través de Facebook mientras éste se encontraba en el país. Este dato fue entregado a la PDI de Concepción y al Ministerio Público por la pareja del ingeniero comercial, Antonella Torelli, en el marco de su declaración policial.

Hoy, sobre Garay existe una orden de captura internacional por los delitos de apropiación indebida y defraudaciones, por no regresar los ahorros de 36 personas que invirtieron en su empresa. El último registro que existe sobre él es del 21 de septiembre, cuando sacó certificado de soltería en Bucarest, la capital de Rumania.

En su testimonio, entregado el pasado viernes a los detectives, Torelli señaló sobre Garay que “él es mi pareja desde marzo del presente año. Me confidenció en su oportunidad, vía Telegram, que estaba en un tratamiento de un cáncer descubierto, según dijo, hace dos años y que afectaba el cerebro”. La mujer declaró  que por este motivo Garay le explicó “que debía viajar a Francia, para efectuarse un tratamiento en un centro hospitalario denominado Gustave Roussy”.

Luego, en su testimonio, Antonella Torelli -quien se desempeña como enfermera- indicó que durante junio de 2016 tuvo una conversación con Garay, ocasión en que él le dijo “que el tratamiento no había resultado, que se sentía mal y que no valía la pena seguir con el proceso (contra el cáncer)”. En ese mismo diálogo, él le preguntó por su estado de salud y por el avance de su embarazo.

Torelli señaló, además, que recordaba aquella conversación, porque lo notó especialmente triste y sin ánimo. Luego declaró que la tomó por sorpresa el viaje que Garay realizó a Francia el 4 de septiembre, porque no le habían comunicado que nuevamente viajaría a ese país. Pocos días después recibió el correo de un amigo de Garay, quien le indicó que el ingeniero se encontraba en tratamiento por su enfermedad. Añadió que el 15 de septiembre, cuando Garay anunció que regresaría al país, se quedó esperando su llamada telefónica, la que nunca se concretó.

Asimismo, dijo que “Rafael consume un medicamento llamado Clonazepán, de forma permanente. Me llama la atención, porque produce un efecto amnésico breve”. Asimismo, anunció que su pareja le había señalado que consumía morfina para los dolores del cáncer, “pero no me consta que la tomara, porque nunca lo vi inyectarse”.

Al término de su testimonio, entregó un antecedente que puede tener relación con la decisión de Garay de ir a Rumania: “En una oportunidad dejó su perfil de Facebook abierto y observé el perfil de una muchacha joven, supuestamente rumana, de nombre Marya Sara, que tenía contacto con él”. La mujer especula que se pudieron haber conocido en Francia, mientras se realizaba su supuesto tratamiento.

Diligencias

El fiscal Centro Norte que indagada la presunta defraudación, José Morales, junto a los efectivos de la Brigada Investigadora de Delitos Económicos (Bridec) de la PDI realizaron dos diligencias claves en el caso: allanaron la residencia particular de Garay, ubicada en Lo Barnechea, así como el lugar en que operaba su empresa Think & Co, en calle Bellavista.

Ayer, también el fiscal y los detectives coordinaron planes de acción para investigar la presunta defraudación. Para esto, se encuentran contactando a las 36 víctimas que ya están identificadas y también se harán diligencias para saber si hay más afectados.

Morales y los policías de la Bridec también solicitaron a la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras (Sbif) información del total de las cuentas bancarias que pueden estar a nombre de Garay. También se ofició al Servicio de Impuestos Internos (SII) para que recopilara su información tributaria. Además, de acuerdo a TheClinic,cl, un informe bancario que le llegó al persecutor indicaba que el 21 de septiembre sacó de su cuenta corriente cerca de $ 3,6 millones.