Siete historias del título de la U en El Salvador

La octava corona azul, en 1994, estuvo marcada por las anécdotas, las historias y algunos recuerdos, para algunos, olvidados.




Hace 20 años, exactamente, Universidad de Chile clebraba un título después de 25 años de espera. Toda la campaña en que lucharon la corona con la UC, el empate en El Salvador y el regreso a Santiago estuvo lleno de anécdotas. Estas son algunas de ellas:

1.

La pelea con Universidad Católica era tan fuerte que traspasó los límites de la amistad. En una jugada del clásico universitario, Juvenal Olmos le hizo una fuerte falta a Patricio Mardones, quien se quedó en el suelo reclamando. La actitud no le pareció bien al cruzado, quien lo increpó con fuertes garabatos en el piso. Y eso que Olmos había sido padrino de una de las hijas del volante azul.

2.

Muchos de los hinchas viajaron al norte sin entrada. En un punto, varios buses fueron detenidos por carabineros para revisar que los pasajeros llevaran sus tickets. El problema tuvo una rápida solución, pues directivos de Cobresal acompañaban a la fuerza policial para vender entradas. En plena carretera.

3.

Poco pudieron celebrar después de los 90 minutos Patricio Mardones y el argentino Raúl Aredes. Ambos fueron elegidos para el control antidopaje, pero el trámite se demoró demasiado, pues ninguno podía llenar el respectivo frasco. Como en los estadios no se podía vender alcohol, un miembro del equipo debió ir a la hostería donde se alojaban a buscar unas cervezas, las que solucionaron el asunto. Tras eso, fueron llevados al avión, al que ingresaron directo en la pista.

4.

Tras el pitazo final, cientos de fanáticos azules se metieron a la cancha y se llevaron lo que tal vez sea uno de los mayores tesoros del desértico campamento minero de El Salvador, el pasto de su cancha. El asunto no quedó ahí, como reconocería después René Orozco, presidente de la U en esos años, el club debió pagar 10 millones de pesos para su reparación.

5.

Quien se quedó sin nada fue Víctor Hugo Castañeda. El volante se dio cuenta de que no reservó ningún recuerdo de ese día en El Salvador. Hasta que un día un hincha se le acercó y le regaló una bolsa con pasto de la cancha. VH lo guardó celosamente hasta que el contenido prácticamente se deshizo.

6.

Mal recuerdo se llevó Cristián Mora, quien al ver que algunos hinchas eran mojados por carabineros se puso a discutir con la fuerza pública. Como resultado se llevó un golpe en la cabeza, presumiblemente de un lumazo. El jugador perdió parte de los recuerdos de esos momentos, se acuerda poco de lo ocurrido en la cancha y un poco más de lo que pasó por la noche en la cena.

7.

Las celebraciones fueron enormes, pero lo que más sorprendió fue quién se convirtió en el líder de la barra en el avión de regreso a Santiago: el ministro de la Corte Suprema Juan Araya. El magistrado perdió toda la solemnidad de su cargo en ese vuelo y parado en los asientos alentaba los ceacheís.

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