Telescopio descubre que glóbulos espaciales son galaxias jóvenes

La investigación resalta la importancia de los agujeros negros en la evolución de las galaxias.




Unos misteriosos glóbulos espaciales resultaron no ser galaxias en formación como suponían los astrónomos, sino que consisten en su mayoría en galaxias adolescentes en plena efervescencia, aseguran científicos.

Un nuevo estudio por medio del Observatorio Chandra de la Nasa y otros telescopios espaciales y terrestres aventura una explicación sobre estos cúmulos de alta energía que han sido observados durante una década

Los astrónomos observaron 29 de esos glóbulos gaseosos en un área distante del universo que data de hace más de 11.000 millones de años.

Una teoría supuso que eran galaxias jóvenes en enfriamiento. Pero las nuevas investigaciones dicen que son calientes y caóticas con halos de gas en los que hay agujeros negros supermasivos en crecimiento y en etapa de estabilización. Los glóbulos son las galaxias adolescentes y el gas hidrógeno, los vestigios de su creación.

El autor principal del estudio, James Geach, de la Universidad de Durham en Gran Bretaña, dijo que el motivo por el que reina el caos "se debe a los procesos violentos que ocurren en las galaxias, el crecimiento de los agujeros negros, estallidos estelares, fusiones. Experimentan una 'rabieta' final antes de terminar de crecer y después se desarrollan 'pasivamente' hasta el presente".

"Estas podrían ser las señales del proceso de maduración", agregó Geach más adelante en una conferencia telefónica.

La investigación publicada este mes en la Astrophysical Journal "es digna de entusiasmo" y enfatiza la importancia de los agujeros negros en la evolución de las galaxias, dijo Baron Martin Rees, astrónomo real de Inglaterra que no participó en la investigación.

El crecimiento de los agujeros negros en el interior se relaciona con el crecimiento mismo de las galaxias.

Pero estos "glóbulos" son casos especiales. Es improbable que nuestra galaxia Vía Láctea haya atravesado por este proceso hace miles de millones de años, dijo Rees. La Vía Láctea es demasiado pequeña.

Los agujeros negros en medio de las galaxias que forman parte de estos cúmulos son por lo menos 300 veces más masivos que el agujero negro dentro de nuestra galaxia, agregó.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.