Marcel anticipa que porcentaje de alza del gasto público será menor al presentado en Ley de Presupuesto 2023

16 DE NOVIEMBRE DE 2022/VALPARAISO La directora de Presupuestos, Javiera Martínez (i) y el ministro Mario Marcel (d), durante la Sesión de la Cámara de Diputados, que discute el proyecto de Ley de Presupuestos 2023. FOTO: LEONARDO RUBILAR CHANDIA/AGENCIAUNO

El ministro de Hacienda indicó ayer en TVN que el aumento sería de 1,4%. Hoy desde Hacienda rectificaron esa cifra y afirmaron que será 1,2%. Ambas de todas formas muy debajo del 4,2% que traía la ley del erario fiscal. La reducción se explica principalmente por la mayor base de comparación debido a la alta ejecución efectiva observada durante 2022, respecto a lo que se había proyectado en el momento de la elaboración del Presupuesto 2023.


Para el jueves se tiene previsto que la Dirección de Presupuestos (Dipres) entregue el Informe de Finanzas Públicas del primer trimestre de 2023. En este documento se conocerá el cierre definitivo 2022 y, con ello, el escenario base que se prevé para 2023. Un cambio que anticipó el ministro de Hacienda, Mario Marcel, en el programa Estado Nacional de TVN, que el gasto público en lugar de crecer 4,2% como está previsto en la ley de Presupuestos 2023, lo hará en 1,4%, por lo que es un ajuste importante en términos de porcentaje, no así en montos.

Hoy desde Hacienda rectificaron la cifra entregada por el secretario de Estado, indicando que sería de 1,2%.

¿Qué explica está reducción en el porcentaje de alza? Principalmente se debe a la mayor base de comparación por la alta ejecución efectiva observada durante 2022, respecto a lo que se había proyectado en el momento de la elaboración del Presupuesto 2023, al llegar a 107,4% de la Ley de Presupuestos 2022. Por ello, a nivel de monto, este es prácticamente el mismo con un gasto de $70.750.455 millones lo que equivale a unos US$86 mil millones.

22 Marzo 2023 Fachada Ministerio de Hacienda Foto: Andres Perez

De esta manera, utilizando el nivel de gastos proyectados para 2023, junto con la actualización de las proyecciones de ingresos efectivos, se estima un déficit efectivo de $6.791.021 millones, equivalente a 2,4% del PIB proyectado para 2023. En relación a la proyección del déficit efectivo del Informe previo de 2,7% del PIB, este se ajusta a la baja en 0,3 pp. principalmente por una revisión al alza en la proyección de los ingresos efectivos para dicho año, según se detalló en el informe del cuarto trimestre.

Ahora bien, se proyecta un déficit cíclicamente ajustado de $5.945.262 millones, equivalente a 2,1% del PIB cifra igual a la meta definida en el IFP pasado, en línea con el Decreto de Política Fiscal.

Si bien en el Informe de Finanzas Públicas del cuarto trimestre de manera preliminar se proyectó un alza de 1,2%, ahora, considerando las declaraciones del ministro, en este nuevo documento se debería corrigir levemente al alza el aumento del erario fiscal.

Felipe Alarcón, economista de Euroamerica, confirma que “parte importante del nuevo cálculo se debe a que se compara contra el gasto fiscal efectivo del año pasado, el cual sobreejecutó presupuesto, por eso cambia el cálculo. El original se comparaba contar el presupuesto que fue al final menor que el gasto efectivo”.

¿Ayuda a contener las presiones inflacionarias? “No necesariamente, ya que como al ser el mismo presupuesto, pero comparado con una base distinta el monto es el mismo”, puntualiza Alarcón.

Dado que habrá una moderación en el gasto, podría haber un espacio para aumentarlo dado el escenario de desaceleración económica. “Dadas las actuales condiciones de altas presiones inflacionarias, hay que evitar un mayor gasto y así colaborar con la política monetaria para controlar la inflación” dice Alarcón.

Mientras que Juan Ortiz, economista del Observatorio del Contexto Económico de la Universidad Diego Portales (OCEC-UDP), menciona que “el espacio para un mayor crecimiento, manteniendo la meta de déficit de 2,1% del PIB para el balance cíclicamente ajustado, obedece a una nueva estimación de los ingresos al alza”.

No obstante, sostiene que “la meta de déficit debería mantenerse, es decir no incrementar la meta de déficit del balance estructural para permitir un mayor gasto, toda vez que el país enfrenta un proceso de ajuste fiscal necesario, para garantizar la sostenibilidad fiscal en el mediano plazo y que la deuda bruta se ubique por debajo del umbral de 45% de deuda prudente, parámetro fijado por el mismo ministerio de Hacienda”.

En este sentido, el economista acota que “la mejora leve que debería traer el nuevo informe del primer trimestre de 2023, debería dar cuenta de un déficit fiscal efectivo más acotado para este año, lo cual es una buena noticia, en la medida que se mantenga el nivel de gasto acorde con la meta de déficit fiscal”.

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