Para vencer a Tesla, Volkswagen apuesta por fabricar sus propias baterías para vehículos eléctricos

En esta foto de archivo se puede ver a un empleado presentar el nuevo modelo eléctrico, el Volkswagen ID.4, durante un programa de prensa en Zwickau, Alemania, el 18 de septiembre del 2020. Fotografía tomada el 18 de septiembre. REUTERS/Matthias Rietschel -/File Photo

La incursión de VW en la producción de baterías muestra las dificultades que enfrentan los fabricantes de autos tradicionales cuando intentan ganar dinero con los vehículos eléctricos (EV).


Muchos de los fabricantes de automóviles tradicionales del mundo están compitiendo para desarrollar sus propias baterías para autos eléctricos, adoptando una estrategia que ayudó a convertir a Tesla Inc. en el jugador más grande del mercado.

El esfuerzo de varios años que realizó Volkswagen AG muestra los desafíos.

Los analistas pronostican que el gigante alemán, que ya es uno de los dos fabricantes de autos más grandes del mundo por ventas, será el mayor fabricante de vehículos eléctricos el próximo año.

Sin embargo, fabricar una batería rentable es clave para determinar si el impulso le permite ganar dinero a Volkswagen.

VW dio a conocer sus primeros planes de producción de baterías en 2019. Los analistas de la industria dicen que la compañía está más avanzada que la mayoría de sus pares de autos antiguos en la capacidad de desarrollar una batería propia, pero inicialmente subestimó la escala y la complejidad de la tarea, según ejecutivos de la compañía.

VW también tuvo problemas para encontrar ingenieros y gerentes calificados en un campo —la química— donde prácticamente no tenía conocimientos. Todavía está luchando para reducir el costo de sus baterías a un nivel sostenible, y la tecnología que está desarrollando para futuras baterías aún no está probada.

Las baterías de los modelos actuales de VW se subcontratan, pero la compañía ha dicho que planea comenzar a construir su primera planta de baterías en Alemania el próximo año. Se espera que más fábricas entren en funcionamiento entre ahora y 2030, afirmó VW, incluidas cuatro en Europa, así como plantas en Estados Unidos y China. A largo plazo, VW está invirtiendo en tecnología experimental que cree podría producir baterías más económicas, duraderas y estables.

La mayoría de los fabricantes de automóviles tradicionales, incluidos General Motors Co. y Ford Motor Co., están buscando fabricar sus propias baterías. El propio plan de VW coincide con la escala de su apuesta general sobre los vehículos eléctricos. La compañía gastó casi US$ 30.000 millones para desarrollar nueva tecnología, incluidos autos eléctricos entre 2018 y 2020, más que cualquier otro fabricante de automóviles tradicional. Ha dicho que gastará más de US$ 41.000 millones en el desarrollo de vehículos eléctricos desde 2021 hasta 2025, sin incluir los costos de las plantas de baterías.

Thomas Schmall, director ejecutivo del negocio de componentes de VW y miembro de la junta a cargo de la investigación y el desarrollo, afirmó que la necesidad de llevar la fabricación de baterías internamente se puede reducir a un simple hecho: las baterías representan aproximadamente el 50% del valor de un automóvil eléctrico.

Comprar un componente tan central a los proveedores, afirmó Schmall, sería “como si hubiéramos dicho en el pasado que no queremos fabricar motores, podemos comprarlos en el mercado”.

Desde el principio, el esfuerzo de VW respecto de las baterías se inspiró en el de Tesla, según los funcionarios de VW. Tesla, el pionero de los vehículos eléctricos en Estados Unidos, fabrica muchos de sus componentes en fábricas integradas que incluyen talleres de ensamblaje, pintura y carrocería y producción de baterías en sitios operados en asociación con fabricantes de celdas para las unidades de baterías.

Ponerse al día no ha sido fácil. Uno de los primeros obstáculos que enfrentó VW —y aún enfrenta— fue la dificultad para contratar ingenieros calificados en campos de los que sabía muy poco.

En 2018, VW robó a un ingeniero eléctrico de Daimler AG. Frank Blome dice que ahora pasa gran parte de su tiempo buscando expertos y organizando capacitaciones para crear un grupo de especialistas. Aproximadamente el 30% de los nuevos puestos en el grupo de componentes están ocupados por candidatos externos.

“Solo te puedes convertir en un experto si lo haces tú mismo”, afirmó Blome sobre las aspiraciones de la batería de VW.

Para expandir su grupo de talentos, VW ha estado aprovechando el sistema de capacitación dual de Alemania que brinda a los estudiantes universitarios capacitación en el trabajo en una empresa y, a menudo, un trabajo después de graduarse. VW ha ofrecido este tipo de formación durante años para estudiantes de ingeniería mecánica y ahora dice que planea implementarlo para ingenieros químicos y eléctricos el próximo año.

Los analistas dicen que uno de los desafíos más difíciles para VW ha sido igualar a Tesla en el costo de sus baterías, a través de economías de escala y el desarrollo de una única plataforma de batería para todos sus modelos. Aún les queda camino por recorrer. Un análisis pieza por pieza del vehículo eléctrico ID.3 de VW realizado por UBS Research descubrió que las baterías de VW cuestan US$ 1.300 más por auto que las de Tesla. VW afirma que confía en que las futuras generaciones de baterías serán más competitivas en costos con las de Tesla.

La competencia y el referente de VW tampoco se ha detenido en la tecnología. El presidente ejecutivo de Tesla, Elon Musk, ha prometido una nueva tecnología de baterías que será más barata de construir y más eficiente.

Para vencer a Tesla, dice Schmall, no es suficiente ponerse al día. VW necesita una bala de plata que le permita superar a la compañía de Silicon Valley y tomar la delantera en tecnología.

La compañía espera tener una en QuantumScape Corp., una startup en la que VW invirtió por primera vez hace unos 10 años. QuantumScape está desarrollando tecnología de batería de estado sólido, que según los científicos tiene el potencial de ser más estable y de cargarse más rápido que la química líquida utilizada en la mayoría de las baterías de iones de litio para vehículos eléctricos.

Se necesitaron años de experimentación antes de que QuantumScape anunciara en diciembre que había logrado un gran avance, probando con éxito por primera vez una celda de batería de estado sólido del tamaño que se usaría en una batería de un auto eléctrico. En teoría, las celdas de estado sólido son menos costosas de producir y pueden cargarse por completo en el tiempo que lleva llenar un automóvil convencional con gasolina.

Después de lograr una prueba de concepto, QuantumScape envió celdas a VW en Alemania, donde VW dice que fueron probadas con éxito en el laboratorio de baterías de VW. Las baterías se cargaron y descargaron miles de veces para probar su rendimiento y estabilidad.

En abril, Scorpion Research, una boutique de inversión que ha puesto para vender en corto las acciones de QuantumScape, publicó un informe en el que calificaba a QuantumScape como un esquema de “inflar y botar”, subir el precio de sus acciones y vender sus participaciones a la primera oportunidad.

Los ejecutivos de QuantumScape han desestimado las críticas y VW ha expresado su confianza en las afirmaciones de la compañía sobre sus logros, después de decir que las había verificado en su propio laboratorio en Alemania en marzo.

Blome afirmó que VW decidirá este año si construye una línea de producción piloto para celdas de batería de estado sólido utilizando la tecnología.

“Las pequeñas celdas construidas en el laboratorio han demostrado que una carga rápida es posible y eso es nuevo”, sentenció Blome. “La carrera aún no se ha corrido, pero básicamente funciona”.

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