La lenta recuperación griega y el acuciante desempleo que no logra bajar de 20%

Tras siete años de estancamiento la economía helénica ve sus primeros brotes verdes. Pero los expertos recomiendan enfocar medidas en la creación de empleo para los jóvenes.




Grecia es símbolo de una de las crisis económicas que se ha prolongado por más tiempo en los últimos años, la crisis de deuda soberana que estalló en 2010, que incluso llevó a discutir la posibilidad de que Atenas saliera de la eurozona y volviera al dracma. Sin embargo, para 2017, las proyecciones del Producto Interno Bruto del FMI apuntan a una expansión de 1,8%, el primer avance significativo tras siete años de malos resultados.

La cifra prevista es esperanzadora y para 2019 el FMI sitúa su crecimiento incluso en 2,6%, manteniéndose estable al menos hasta 2022. La economía ha crecido este año por tres trimestres consecutivos (entre abril y junio superó a la expansión de UK) y, en un paso crucial para el gobierno y sus finanzas, Grecia se endeudó en los mercados internacionales de bonos en julio, después de tres años de ausencia.

[ze_adv position="adv_300x100" ]

Pero la recuperación es lenta. Paul Sullivan, economista de la Universidad de Georgetown, destaca el "triste" momento por el que pasa Grecia y subraya que "cuando (un país) se encuentra en un mal momento económico, lo mejor es reducir los impuestos y aumentar el gasto público, para acelerar la actividad, así como aumentar la oferta monetaria para reducir las tasas de interés". Justamente, eso es lo contrario a lo que hizo el gobierno de Alexis Tsipras, que optó por aumentar impuestos en 2016. Un informe de Taxing Wages mostró que Grecia se transformó en el país con mayor aumento tributario entre 2015 y 2016 en la OCDE, con un incremento del 1,06%.

[ze_adv position="adv_300x250-A" ]

El origen de la crisis. Para entender la abismante caída de Grecia en términos económicos hay que remontarse a la década pasada. Tras una serie de malas decisiones administrativas y el desacato al Pacto de Estabilidad de la Unión Euopea en 2009 el país llegó a registrar un déficit público de 13,6%, pese a que el acuerdo era claro y estricto: ninguna nación podía sobrepasar el 3%.

Lo mismo ocurrió con la deuda, que debía situarse bajo 60% del PIB, pero llegó hasta el 113%.

El Gobierno de ese entonces, liderado por el conservador Kostas Karamanlís, maquilló cifras para ocultar el grave desorden de las arcas financieras, situación que terminó con la denuncia de la Comisión Europea, a través de un informe que se dio a conocer dos meses después de que el socialista Yorgos Papandreu asumiera el poder.

El 8 de diciembre de 2009, hace ocho años, la bolsa y los bonos de Grecia se desplomaron, dando origen a la primera gran crisis del euro.

Al año siguiente la economía de Grecia entró en caos, con una contracción de -5,5%, que empeoró a -9,1% al año siguiente.

En medio del período que ha perdurado la crisis, Atenas ha debido acudir a tres rescates económicos por parte de la Eurozona: el primero de ellos por 110.000 millones de euros para 2010-2012 y luego un segundo por 130.000 millones de euros hasta 2014. El tercer programa de rescate debería terminar el próximo año, después de siete años de despidos forzados, recortes de sueldos y gasto público, privatizaciones y otras reformas.

[ze_adv position="adv_300x250-B" ]

La irrupción de tsipras. En 2009, el ingeniero civil de la U. Politécnica Nacional de Atenas, Alexis Tsipras, se convertía en el líder de la oposición. Al alero de Syriza, coalición de la izquierda radical, el joven político logró notoriedad mediática durante los primeros años de la crisis. Su fuerte crítica a la administración de Papandreu y la eficacia conducción de su partido lo llevaron a convertirse en Primer Ministro en 2015. Desde entonces ha implementado políticas de austeridad, que han sido objeto de cuestionamientos y protestas.

[ze_adv position="adv_300x250-C-net" ]

Pero junto al plan económico que Tsipras busca ejecutar durante su administración, los números han pasado de rojo a azul.

La inflación proyectada por el FMI para este año se enmarca en 1,23%, subienro a 1,29% en 2018. Esto se compara con el 0% de 2016.

No obstante, una de las mayores preocupaciones de esta recesión ha sido la alta cifra de desempleo, que este año llegaría a 22,7%, habiendo alcanzado un máximo de 27,5% en 2013.

Para Sullivan, "Grecia debería centrarse en el desempleo juvenil, porque de allí podrían provenir muchos problemas sociales e inestabilidad civil". Por otra parte, asegura que la creación de empleo es muy importante "para diversificar su economía, y eso requerirá una gran cantidad de inversión extranjera".

Comenta

Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.